La final del Challenger de Buenos Aires enfrentará a los preclasificados Federico Coria y Francisco Comesaña, asegurando un nuevo título para Argentina en el circuito.
Las iniciales en la consagración del Challenger de Buenos Aires serán las mismas: FC, independientemente de quién se imponga en el torneo. El santafesino Federico Coria y el marplatense Francisco Comesaña, quienes están preclasificados como el primer y segundo sembrado del certamen, se enfrentarán en la cancha central del Racket Club Palermo. Este encuentro definirá quién levantará el trofeo mayor y otorgará a Argentina su título número 423 en la categoría de challengers, siendo este el número 19 de la temporada.
En las semifinales, Juan Bautista Torres se encontró con un rival complicado. Con un estilo de juego rápido y tiros rasantes profundos, Bauti, quien ahora es dirigido por el equipo de Sebastián Gutiérrez, asumió riesgos en cada pelota. Esta no solo es una característica de su forma de sentir el tenis, sino que también ha logrado romper con un ranking que parecía monótono. El partido comenzó de manera favorable para Coria, quien, gracias a un juego más profundo que el día anterior, tomó una ventaja de 4-1. Sin embargo, a partir de ese momento, la intensidad del juego pareció decrecer, posiblemente debido a la dinámica del calor bajo el sol porteño.
Nacido en Vicente López, Torres ajustó su enfoque y ganó cinco juegos consecutivos, colocándose en una posición de 5-4 con serias intenciones de cerrar el primer set. La parte mental también juega un papel crucial en el tenis, y esto permitió que Coria no pudiera ganar los siguientes tres juegos, llevando el set a un tie break. En este desempate, Coria tuvo puntos de set a su favor, pero en el último punto del primer parcial, se vio envuelto en una desesperada carrera hacia adelante, buscando alcanzar la pelota antes de que picara por segunda vez. Este esfuerzo lo llevó a caer al suelo, girando su torso y terminando en el polvo de ladrillo. La alegría del jugador, apodado “Mojarra”, se hizo evidente cuando terminó literalmente nadando en el polvo mientras la pelota se iba fuera de los límites. Después de un reñido desempate que terminó 13-11, Coria, habiendo entregado todo, se mostró categórico y contundente, volviendo a imponerse con seis juegos consecutivos, lo que dejó a todos asombrados, ya que parecía que había cedido un partido que estaba casi ganado, lo que habría forzado una tercera manga.
“Cuando estaba abajo, una persona en la tribuna me dijo que iba a dar vuelta el partido y prometí que si eso pasaba, regalaba mi gorra”, comentó Federico al finalizar el encuentro. En la segunda semifinal, Comesaña tuvo que esforzarse considerablemente. Se enfrentó al tenista boliviano Hugo Dellien, un jugador conocido por su formación y características de luchador, lo que llevó a una batalla de dos horas bajo el sol. Finalmente, Comesaña logró acceder al encuentro que definirá al campeón. “Disfruté mucho esta semana -dijo al término del partido-. Hasta ahora, me tocó jugar contra tenistas extranjeros, así que el público siempre estuvo de mi lado. Mañana será diferente, porque él tiene mucha gente que lo quiere”.
Además de las semifinales de singles, Comesaña también llegó a la final de dobles, donde su pareja, Facundo Mena (ARG) y Murkel (BOL), se impusieron a los brasileños Felipe Melingeni Alves y Marcelo Zormann con un marcador de 1-6, 6-2, 12-10. La novena edición del Challenger de Buenos Aires se llevará a cabo el domingo, comenzando a las 13:00 horas, donde los argentinos se enfrentarán en la cancha, siendo Comesaña uno de los protagonistas. Los resultados de las semifinales fueron: (1) Federico Coria 7-6(11), 7-5; (2) Francisco Comesaña 6-4, 3-6.