Vale Saini revela su lado más oscuro: “Quiero un humor más negro y ácido”

Vale Saini: Humor y autenticidad en un mundo que a menudo reprime la risa.
Vale Saini: Humor y autenticidad en un mundo que a menudo reprime la risa.

Valentina Saini Aguilera, actriz y comediante, reflexiona sobre su vida, la maternidad y su carrera en el stand up, fusionando humor y experiencias personales.

Sigo en la adolescencia, en mi segunda adolescencia —declara Valentina Saini Aguilera, quien, a sus 39 años, siente que la juventud solo evoluciona, se transforma y se convierte. A pesar de los años, esa juventud permanece dentro de ella. Después de un largo camino en el que ha luchado por hacerse un lugar en el reconocimiento, la actriz y comediante ha logrado consolidarse en el ámbito del humor, acumulando cerca de 850 mil seguidores en Instagram. Se ha abierto paso en el stand up, además de ser conductora del programa de las tardes de FMDOS, Dedicados, y formar parte del panel del nuevo espacio de farándula de Canal 13, Hay que decirlo, que es conducido por Nacho Gutiérrez y Pamela Díaz.

“Estoy más grande, es otra adolescencia distinta”, reflexiona Valentina durante una entrevista con La Cuarta en una de las salas de su actual casa televisiva. “Sigo siendo joven, tengo más energía, pero estoy mucho más madura que antes”. Aunque se define como “tímida”, su capacidad de hablar fluye naturalmente, y se sincera mientras lanza una broma tras otra, dejando claro cuándo habla en tono de broma y cuándo es serio. A veces, el humor se entrelaza con la realidad. En una conversación con La Firme, repasa su historia, recordando cómo de niña fantaseaba con ser “famosa”, aunque siempre con la idea de ser una “famosa sencilla”.

Tras estudiar Teatro, Valentina enfrentó dificultades para abrirse paso en su carrera, siendo “la frustración” el motor que impulsó su trayectoria. A los 23 años, se embarazó de Matilda, su hija, con quien entonces era su pololo, el chico reality Sebastián Ramírez, con quien actualmente no mantiene relación. El humor se ha convertido en “su terapia”, y la fiesta y la clase alta son su materia prima para hacer reír y, al mismo tiempo, criticar y cuestionar. La radio y la televisión le han proporcionado estabilidad laboral. En cuanto a su vida amorosa, no busca compromisos por el momento y desea explorar un humor más “negro” y “ácido”.

En un relato personal, Valentina recuerda un incidente de su infancia: “Cuando chica me tiraron a la piscina, porque un primo se ahogaba y lo salvé… heavy… Era una reunión familiar y una prima me tiró, me dijo ‘¡ayuda, ayuda!’ y lo salvé, no sé cómo”. A pesar de su hazaña, se sintió rara porque nadie la felicitó, y su primo ni siquiera lo recuerda. También comparte su experiencia en el tenis, donde fue reconocida como la Mejor deportista, pero una frustrante derrota la llevó a dejar el deporte por un tiempo. “Me habría encantado dedicarme al tenis”, confiesa, destacando su amor por los deportes individuales.

Valentina también reflexiona sobre su timidez y su ascendente en Leo, que le ayuda a salir de su lado introspectivo cuando es necesario. Recuerda que de niña era un poco tartamuda, lo que la llevó a observar más que a hablar, una habilidad que le ha sido útil en su carrera. Durante su época escolar, enfrentó dificultades de aprendizaje y fue diagnosticada con problemas de concentración, lo que la llevó a cambiar de colegio. A pesar de sus desafíos, siempre fue competitiva y disfrutó de la competencia.

En su vida familiar, Valentina menciona que su relación con su padre ha mejorado con el tiempo, aunque de niña sentía que le faltaban límites. Esto la llevó a ser desafiante con los hombres. Reflexiona sobre cómo las familias solían ser diferentes en el pasado, y cómo la falta de comprensión sobre la salud mental afectaba a los niños. “Siempre he tenido mucha pila”, dice, recordando su adolescencia y las rabias que hizo pasar a sus padres. “Era buena para carretear, para no llegar a la hora”, añade con humor.

Valentina también comparte su deseo de ser monja en su infancia, una idea que se desvaneció con el tiempo. “Siempre tuve una hueá rara de que quise ser monja”, dice, recordando visiones que tuvo de la Virgen. A lo largo de su vida, ha desarrollado habilidades para imitar acentos y ha trabajado en diversos roles, desde promotora hasta actriz. “Siento que la ira y la rabia son emociones muy buenas, si las transformas amorosamente”, reflexiona sobre su proceso creativo.

El stand up ha sido un medio para Valentina para expresar sus frustraciones y conectar con el público. “Siempre quise ser famosa, y quería ser famosa y sencilla”, recuerda, añadiendo que su deseo de ser madre joven también formaba parte de sus sueños. La llegada de su hija Matilda fue un momento crucial en su vida, aunque la relación con Sebastián Ramírez se tornó complicada. “Se me rompió el corazón cuando Sebastián se fue a Nueva Zelanda”, confiesa, recordando el dolor que sintió y cómo eso afectó su vida.

Valentina describe su experiencia como madre joven, enfrentando desafíos y momentos de soledad. “La Mati es la persona más importante para mí”, dice, destacando el amor que siente por su hija. A pesar de las dificultades, ha logrado establecer una relación cercana con Matilda, quien ha crecido en un ambiente lleno de amor. “Siempre hice lo mejor posible”, asegura Valentina sobre su papel como madre.

En cuanto a su vida laboral, Valentina ha encontrado en la radio y la televisión un espacio donde puede ser ella misma. “La radio me encanta, fue un descubrimiento”, dice, destacando la importancia de tener un trabajo estable. Su participación en el programa Hay que decirlo fue una experiencia nueva, y aunque al principio se sintió nerviosa, ha aprendido a encontrar su lugar en el equipo.

Valentina también menciona su deseo de explorar nuevos horizontes en su carrera, como participar en festivales de comedia. “Me interesa ir al Festival de Olmué”, expresa, reconociendo que la adrenalina de actuar en un escenario es algo que le apasiona. A pesar de los desafíos que ha enfrentado, Valentina se muestra optimista sobre su futuro en el mundo del humor y la comedia.