La mansión de Jeffrey Epstein, ubicada en el exclusivo Upper East Side de Nueva York, ha vuelto a ser noticia esta semana tras ser vandalizada con mensajes de apoyo a Luigi Mangione, presunto asesino del CEO de United Healthcare, Brian Thompson. Según informó New Post, la fachada de este inmueble, que en el pasado albergó a figuras poderosas y sirvió como centro de actividades ilícitas, fue cubierta en la madrugada del viernes con pintadas de aerosol de color rojo que incluían las frases “Deny, Defend, Depose” y “Free”. Yahoo News destacó que estas palabras se han convertido en un símbolo asociado a quien había grabado previamente balas utilizadas en el asesinato. La frase ha adoptado un carácter de lema oscuro que ha sido replicado en diversas partes del mundo.
Además de la frase mencionada, también se escribieron otras consignas en la propiedad principal, tales como “They Fear The People” y “Free Luigi”. Estas pintadas, que se habrían realizado en defensa de Mangione, no perduraron mucho tiempo, ya que, según se indicó, para el mediodía del viernes, trabajadores llegaron al lugar para limpiar los grafitis y restaurar la mansión.
Esta no es la primera vez que el inmueble es objeto de actos vandálicos. En reportes anteriores, se señalaron testimonios de vecinos del edificio, quienes aseguraron que durante años ha sido blanco de incidentes similares. Afirmaron que en otras ocasiones la casa había sido manchada con sangre de animales y excremento. La mansión cuenta con una historia oscura, que parece haber atraído una mezcla de interés macabro y rechazo colectivo desde el arresto y posterior suicidio de Epstein en 2019.
Actualmente, la propiedad está en manos de Michael Daffey, un exejecutivo de Goldman Sachs, quien la compró en la primavera de 2021 por 51 millones de dólares, una gran rebaja frente a su precio inicial de 88 millones de dólares. El asesinato de Thompson, del cual Mangione ha sido acusado, ha generado un creciente movimiento simbólico que se refleja en los grafitis. Aunque las pintadas no duraron mucho, el impacto mediático suscitado ha generado un amplio debate sobre la forma en que los casos o legados continúan transformándose.
La conexión entre estos hechos y los eventos actuales asociados llama la atención sobre cómo ciertos símbolos pueden adquirir resonancia global. Hasta ahora, ni la familia del acusado ni los propietarios de la mansión se han pronunciado sobre los recientes ataques. La mansión, conocida no solo por su exorbitante precio, sino también por los abusos sexuales y el tráfico de personas, continúa siendo materia de conversación y controversia. Mientras tanto, “Deny, Depose” sigue expandiéndose como un críptico llamado que parece ir más allá del caso judicial de Mangione.