La actriz Javiera Díaz de Valdés realizó un reclamo público en redes sociales contra Pablo Mackenna, acusándolo de deber pensión de alimentos. En agosto de 2024, la intérprete aprovechó un posteo de Mackenna, que contenía la palabra: “Tohá”, para expresar su descontento. En su mensaje, Díaz de Valdés cuestionó: “¿Te gusta? ¿Votas por ella? ¿Qué pensará ella de los papitos corazón? ¿Cuáles serán sus políticas al respecto? Llevamos años ya Pablito”.
La situación fue abordada por la propia Díaz de Valdés en una entrevista con Javiera Quiroga, donde comentó sobre su preferencia por mantener su vida personal en privado. “A mí la verdad es que no me gusta exponer mis cosas. De hecho, toda la vida me he quedado súper callada con mis temas familiares, he sido lo más discreta y elegante que hay, con temas que han sido hasta públicos, pero claro, hubo un día en que ya no”, expresó la actriz.
Por su parte, Pablo Mackenna fue consultado sobre las acusaciones en el programa Primer Plano. En su intervención, el escritor aclaró que no tiene una deuda de “años” con su exesposa, sino que se trata de un atraso de solo dos meses.
Mackenna definió a los ‘papitos corazón’ como aquellos que han abandonado a sus hijos y que no los ven. “Yo veo a mi hija todos los días, tenemos una relación increíble, pasamos buena parte de todos los días juntos”, afirmó.
El expanelista de CQC añadió que la denuncia de Díaz de Valdés se debió a un mes de atraso en los pagos, explicando que ha enfrentado dificultades económicas. “Cuando la Javiera hace esta denuncia, o la insinúa, yo llevaba un mes atrasado, porque me ha costado, no ha sido fácil el año”, comentó.
Además, Mackenna se defendió diciendo que no se considera un ‘papito corazón’ por deber dos meses de pensión. “He pagado toda mi vida, mucha plata, además, porque yo hice un trato en la época que tenía mucha plata, muy pesado, muy difícil de cumplir”, sentenció.
Finalmente, el escritor concluyó: “Yo tengo una relación maravillosa con mi hija, entonces es súper doloroso, pero bueno, sí, efectivamente, en este minuto, debo dos meses.”
