El padre de Liam Payne, el fallecido cantante británico, ha finalizado el proceso de repatriación de los restos de su hijo desde Buenos Aires hacia Londres. Este proceso ha estado marcado por una serie de trámites complejos y emotivos que incluyeron la identificación del cuerpo, así como visitas a la morgue, comisaría y fiscalía. Tras más de cinco horas en la fiscalía porteña, logró la liberación del cuerpo, lo que permitió que una empresa de servicios funerarios lo trasladara al barrio Belgrano, donde se realizaron los preparativos para el embalsamado. Se estima que los restos serán repatriados en un plazo de 24 a 48 horas, permitiendo que su madre y hermanas puedan despedirlo en paz. La tragedia comienza a escribir su último capítulo en Buenos Aires.
El exintegrante de la popular banda británica One Direction falleció el 16 de octubre tras caer desde el balcón de su habitación en un hotel del barrio Palermo. Su muerte conmocionó a sus fanáticos alrededor del mundo y dejó un profundo vacío en su familia, que no ha dejado de buscar respuestas en medio de esta tragedia. Dos días después del trágico suceso, su padre llegó a la capital argentina dispuesto a enfrentar el complejo proceso de recuperar y devolver a su hijo a casa.
La odisea de repatriación está cerca de llegar a su fin, ya que el padre de Liam ha conseguido que la fiscalía le liberara el cuerpo, lo que marca el inicio de la etapa decisiva para la repatriación. Acompañado por un equipo de custodia que lo sigue a todos lados, el hombre ha estado buscando en el país los medios para llevar a su hijo de vuelta. Después de rubricar los trámites necesarios, se dirigió con una sensación de tormento a finalizar el proceso.
Cerca de la medianoche, un vehículo de la cochería trasladó el cuerpo desde la morgue ubicada en la calle Viamonte. Allí, los fanáticos montaron otro memorial improvisado, mientras que un operativo de distracción incluyó el movimiento de tres camionetas. Los músicos ingresaron directamente a la capilla donde se comenzó a trabajar en el embalsamado del cuerpo. Se espera que, una vez que llegue a Londres, su madre y hermanas puedan finalmente descansar y comenzar a despedirse de él.
Así parece que se acerca a su fin el periplo de Geoff Payne. Al aterrizar en el aeropuerto Ezeiza, se enfrentó a momentos angustiantes en su intento de llevar a su hijo de vuelta. La primera parada fue la morgue judicial, donde tuvo que realizar el desgarrador acto de identificar a su hijo, un encuentro que marcó el inicio de un recorrido lleno de dolor y trámites agotadores. Con cada paso, no solo se enfrentó a la burocracia, sino también a la soledad y tristeza que invadieron su visita oficial.
Uno de los momentos simbólicos de este viaje ocurrió en el Hotel CasaSur de Buenos Aires, el lugar donde Liam sufrió la caída. Frente a este lugar, su padre buscó un momento de silencio, con la esperanza de que ese espacio pudiera ofrecerle algo de claridad sobre los últimos momentos de su hijo. Este lugar se ha transformado en el epicentro de la atención mediática, que sigue de cerca la situación. Las imágenes de Geoff caminando por las calles porteñas, ajeno y abrumado por la burocracia que debe atravesar para dar descanso a su hijo, han capturado la atención mundial.
Mientras tanto, la investigación avanza y nuevos descubrimientos arrojan luz sobre las posibles circunstancias del incidente. Análisis forenses recientes han confirmado la presencia de cocaína en el organismo del cantante, un hallazgo obtenido a través de exhaustivos estudios de laboratorio. Esta revelación es significativa en el curso de la investigación, ya que aporta una nueva perspectiva sobre el estado físico y emocional que pudo haber llevado a las autoridades a revisar detenidamente las cámaras de seguridad y profundizar en las entrevistas realizadas a testigos y empleados del establecimiento.
