La complejidad del seguimiento de los resultados electorales en Estados Unidos y su impacto en la percepción de los candidatos.
La noche de las elecciones en Estados Unidos se asemeja a un rompecabezas, donde solo se revela una pieza a la vez y no se puede observar la imagen completa. A medida que miles de condados y localidades informan sus totales de votos, se vuelve complicado determinar cuándo los conteos reportados reflejan resultados definitivos. El primer informe puede mostrar una ventaja considerable para un candidato, pero esta puede disminuir en algunas contiendas mientras que en otras aumenta. Esto se debe a que, a menudo, las actualizaciones de grandes ciudades confirman al ganador cuando aún queda una cantidad significativa de votos por contar. La diferencia entre un “espejismo” y un resultado fidedigno puede ser sutil.
Las elecciones pasadas pueden servir como guía, ya que muestran que el voto por correo ha favorecido fuertemente a los demócratas, y en algunos estados, estas papeletas se cuentan primero. Esto puede crear un “espejismo azul”, donde al final se producen victorias estrechas o incluso triunfos significativos para los republicanos. Además, se ha demostrado que los republicanos tienden a perder en las grandes ciudades, pero aún así logran ganar las elecciones.
Sin embargo, las reglas y patrones habituales pueden cambiar, ya sea por modificaciones inesperadas en el proceso administrativo del estado o por cambios en el comportamiento de los votantes. Algunos ejemplos de estados clave pueden ayudar a entender qué esperar desde el cierre de las urnas. Florida, que es uno de los primeros estados en cerrar, proporciona pistas iniciales sobre cómo va la elección. Los resultados comienzan a llegar a partir de las 7 p.m., hora del este, aunque los últimos resultados pueden no estar disponibles hasta las 8 p.m. Esto no significa que se den a conocer actualizaciones de votaciones, ya que los informes pueden incluir votos anticipados y boletas enviadas por correo. Sin embargo, hay suficiente información disponible para ayudar a descifrar el panorama electoral en ese momento.
La ley exige que cada condado informe primero sobre sus votos anticipados, que tienden a inclinarse hacia los demócratas. Durante los últimos dos ciclos electorales, los demócratas han votado más, lo que significa que los primeros informes a menudo parecen favorables para sus candidatos. A medida que se cuentan más votos, la situación puede cambiar. Por ejemplo, en la carrera por el Senado de 2022, el senador republicano Marco Rubio se enfrentó a la demócrata Val Demings. Demings ganó en las primeras votaciones en Broward, con casi 30 puntos porcentuales de ventaja, pero perdió minutos después en Miami-Dade, lo que fue una señal preocupante, ya que estas primeras votaciones deberían haber sido favorables para ella. Al final, Rubio fue reelegido con un 58% frente al 41% de Demings.
En Virginia, aunque el orden de los acontecimientos tiende a variar según lo que decidan hacer los condados, existen estrictas regulaciones que dictan cuándo deben publicar los resultados. En el pasado, los suburbios del norte reportaron conteos que tomaron horas. La mayoría de los votantes demócratas están dispersos geográficamente, mientras que los republicanos tienden a concentrarse en áreas más pequeñas. En 2020, Donald Trump lideró frente a Joe Biden durante cinco horas después del cierre de las urnas, antes de que Fairfax, un condado demócrata, informara sobre 400,000 votos alrededor de las 12:30 a.m., lo que cambió el margen porcentual.
Georgia permite que se comience a contar los votos por ausencia antes del cierre de las urnas, y tienen cantidades listas para informar. Estos reportes suelen ser desproporcionadamente favorables para los demócratas. Es importante estar preparado para el tiempo que puede tomar el proceso. Después de los informes iniciales, el resto de los votos puede tardar bastante en ser enviado y contado. En la elección de 2022, ninguno de los candidatos recibió más del 50% de los votos, y Raphael Warnock terminó con solo un punto porcentual de ventaja, que fue certificado en las elecciones generales. Este otoño, la Junta Electoral del Estado aprobó una nueva regla que requiere que los trabajadores cuenten a mano los votos emitidos, lo que ha generado críticas, incluido el secretario de Estado Brad Raffensperger, quien teme que esto retrase el reporte de los resultados electorales.
En Ohio, el representante Tim Ryan comenzó su conteo en Franklin, donde encontró que en Columbus, la capital del estado, un lote fue reportado con un 74% a favor de J.D. Vance, quien ahora es compañero de fórmula de Trump. Este fue un gran impulso para Ryan, ya que Franklin representa aproximadamente un tercio del nivel estatal. La razón de este gran margen temprano en la noche puede estar relacionada con el voto por correo, que se publica en los informes previos. A medida que se acercaban las elecciones, J.D. Vance lideraba por 6 puntos.
En Carolina del Norte, aproximadamente a medianoche, Cheri Beasley tenía 200,000 votos, mientras que Ted Budd contaba con 150,000, y todas las papeletas anticipadas y en persona serían recibidas posteriormente. Esto podría verse afectado por la emergencia implementada tras el huracán Helene, que devastó partes del oeste del estado. Entre otros cambios, se informó que 13 lugares afectados por Helene no podrían abrir sus oficinas hasta las 7:30 a.m. para contar los votos.
Pensilvania siguió un patrón similar en 2022. Los informes iniciales incluyeron una parte que favorecía a John Fetterman, quien comenzó a reducir la brecha en la contienda por el Senado. Los votos que se informaron provenían de áreas registradas. Mehmet Oz logró alcanzar a Fetterman a medida que se tabulaban los votos rurales, pero cuando la AP declaró a Fetterman como el ganador, se estimó que quedaban 800,000 votos por contar, que correspondían a márgenes amplios en Filadelfia y sus alrededores, como Delaware, Bucks y Montgomery.
La situación en “lugar rojo” puede variar en diferentes momentos de la noche, y la forma en que se informen los resultados puede influir en la percepción pública. En Wisconsin, los municipios que eligen reportar combinan algunos, como Milwaukee, lo que puede diluir las posibilidades de un espejismo y añadir un elemento de imprevisibilidad. Milwaukee, por su parte, informa de manera que dificulta saber cuántos votos quedan por contar, ya que los funcionarios no proporcionan información específica sobre cuántos votos han sido contados. Normalmente, los resultados altos se publican en la madrugada del miércoles, lo que suele ser necesario en contiendas reñidas. Michigan y Wisconsin, debido a su geografía, son mejores indicadores de la dirección de la contienda según el tipo de voto. En el condado de Wayne, que incluye a Detroit, y en Oakland y Washtenaw, se publican porcentajes significativos que pueden llevar a conclusiones apresuradas. Wayne incluye a Detroit, mientras que Ann Arbor alberga la Universidad de Michigan.
Por último, es importante tener en cuenta que el sitio web electoral generalmente prolonga el número de días necesarios para contar los votos. Arizona, por su parte, informará debido a que las actualizaciones llegan de manera significativa. Históricamente, la mitad de las actualizaciones se producen en este estado. Esto ha llevado a que muchos se pregunten sobre la rapidez con la que se cuentan los votos, lo que puede complicar aún más la situación en los estados. Las “tardías tempranas”, que son las incluidas en las elecciones, se han vuelto un tema de discusión, especialmente en 2020, cuando Mark Kelly en Maricopa, que se asienta en Phoenix, publicó un informe de 837,000 votos. Él mantuvo su ventaja, pero la cantidad de votos contados logró minar su posición.
