En cifras que aún podrían elevarse, hasta hoy se contabilizan 41 contagiados con coronavirus y 82 contactos estrechos entre los jóvenes que participaron en el polémico evento que tuvo lugar en Cachagua, región de Valparaíso.
Una rápida propagación que preocupa a los vecinos del balneario: “Es terrible, porque contaminan y después se van. Son puros veraneantes”, dijo un residente del sector.
Las autoridades sanitarias aseguran que buscarán uno a uno a los organizadores y participantes para establecer sanciones. Por el momento, se han anunciado cuatro sumarios sanitarios: dos de ellos para los organizadores, quienes deberían pagar una multa que asciende a los $50 millones.
El resto de los sumarios son para dos jóvenes, tras detectarse que estaban incumpliendo la cuarentena. Deberán pagar la máxima que estipula el Código Sanitario: $25 millones.
El seremi de Salud de la región de Valparaíso, Franciso Álvarez, dijo que “hemos encontrado una serie de contradicciones luego de las entrevistas de las personas afectadas, las que atentan contra la salud pública. Estamos ante un supuesto delito que la Fiscalía debe investigar”.
De la mano de lo anterior, también se autorizó a los inspectores municipales de Zapallar para cursar sumarios sanitarios en sus fiscalizaciones.
Mientras la mayoría de los protagonistas de la polémica fiesta estarían cumpliendo cuarentena en el mismo balneario, el temor de los vecinos aumenta por la eventual falta de trazabilidad que pueda existir.
“La gente está preocupada y asustada. Se siente insegura, creen que se van a contagiar. En esta comuna tenemos muchos adultos mayores”, dijo el doctor Guillermo Marcone.
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