Este fin de semana se estrenó en la plataforma de Netflix la primera película de Anna Kendrick como directora, Woman of the Hour. En esta cinta, la actriz de Pitch Perfect interpreta a Cheryl Bradshaw, una aspirante a actriz que participa en un popular programa de citas en EE.UU., The Dating Game. Sin embargo, tras elegir a uno de los postulantes, todo da un giro inesperado debido a un extraño presentimiento de la artista hacia su elegido, Rodney Alcalá, a quien terminó por rechazar. Este presentimiento fue crucial, ya que Alcalá era en realidad un asesino en serie que había cobrado la vida de más de 100 mujeres. Su primera víctima tenía solo ocho años y, aunque fue encarcelado por menos de tres años, esto no detuvo su carrera criminal.
¿Quién era Rodney Alcalá?
Nacido en 1943 en México, el asesino en serie pasó sus primeros años en su país natal hasta que se trasladó con su familia a Los Ángeles, EE.UU. A la edad de 17 años, se enlistó en el ejército, pero fue expulsado tras una evaluación psicológica que reveló características alarmantes, según detalla CBS. El informe de la institución que lo dio de baja describía a Alcalá como poseedor de una “personalidad narcisista maligna con psicopatía y sadismo sexual”. A los 21 años, tras su salida del ejército, decidió estudiar artes en la Universidad de California. Fue después de su graduación que Alcalá cometió su primer crimen, atacando a la pequeña Tali Saphiro, quien fue la única sobreviviente de sus agresiones.
La primera víctima
Según El Clarín, en ese momento, el asesino sorprendió a la niña de ocho años cuando se dirigía a su escuela. La tomó y la metió en el maletero de su auto. Lo que Alcalá no sabía es que un automovilista lo había visto y lo siguió hasta denunciarlo. Cuando la policía llegó al departamento donde tenía a la pequeña, la niña estaba desmayada en el piso de la cocina, sangrando por un golpe en la cabeza, pero aún respiraba. Debido a que la policía lo había incluido en la lista de “más buscados”, Rodney tuvo que abandonar Los Ángeles y se trasladó a Nueva York, donde estudió cine bajo el nombre falso de John Berger.
En Nueva York, su coeficiente intelectual de 135, considerado superdotado, le permitió convertirse en uno de los mejores alumnos del cineasta Roman Polanski. Durante este tiempo, entre 1968 y 1970, Alcalá disfrutó de su libertad y cometió sus primeros asesinatos. Su primera víctima fue una azafata de 23 años, Cornelia Crilley. Utilizando su conocido modus operandi, se presentaba como fotógrafo y ofrecía a mujeres jóvenes hacerles un portafolio. Con esta excusa, las trasladaba a lugares remotos donde las asfixiaba hasta que perdían el conocimiento. Una vez inconscientes, Rodney las violaba y, al despertar, repetía el proceso antes de asesinarlas.
A pesar de que el asesino pasó varios años sin ser encontrado por la policía, fue condenado en 1971 tras ser identificado en la lista de más buscados del FBI. Sin embargo, pasó solo 17 meses en prisión. Su impunidad alcanzó un nuevo nivel cuando en 1978 se mostró públicamente en televisión nacional al participar en The Dating Game.
Un asesino en serie en un “dating show”
En ese entonces, se convirtió en uno de los tres concursantes que competían por una cita con la soltera Cheryl Bradshaw. Utilizando su carisma y simpatía, Rodney respondió a todas las preguntas de la aspirante a actriz, siendo presentado como un “fotógrafo profesional”. En una de sus respuestas, incluso se comparó a sí mismo con un plátano, afirmando que por la noche es cuando “se pone bueno de verdad” y adoptando el papel de un viejo verde, según recoge People. Alcalá logró ganar la cita, pero la joven terminó rechazándolo. Años más tarde, ella misma le confesó a la coordinadora del show que algo no estaba bien. “No puedo salir con este tipo. Tiene unas vibraciones muy raras. Es muy raro. No me siento cómoda”, le dijo.
A pesar de que su rostro fue transmitido en televisión abierta y estaba en la lista de más buscados del FBI, nadie logró reconocerlo, y Rodney Alcalá continuó libre.
Más de 130 víctimas
No fue hasta 1972 que Alcalá fue finalmente capturado. En ese momento, se acercó a la pequeña Robin Christine Samsoe, de 12 años, en Huntington Beach, cuando esta se dirigía a clases de ballet. Le ofreció tomarle unas fotografías. Cuando comenzó la búsqueda, los amigos de la pequeña describieron al extraño que le pidió posar, lo que permitió a la policía crear un boceto que fue utilizado para identificarlo por un oficial de libertad condicional. Sin embargo, Rodney ya había asesinado a la niña.
El asesino en serie fue sometido a juicio, donde fue condenado a muerte en dos ocasiones, pero las apelaciones aplazaron la decisión por al menos tres décadas, según recoge Infobae. Finalmente, en 2010, recibió la condena definitiva: pena de muerte. Aunque fue procesado por cinco asesinatos, tras años de investigación se descubrió, a través de las fotografías que tomaba a sus víctimas, que la cantidad de mujeres asesinadas ascendía a más de 130.
Rodney Alcalá murió hace tres años en el “corredor de la muerte”, esperando que se cumpliera su pena, por causas naturales debido a su edad. Tenía 78 años.
Woman of the hour y el caso de Rodney Alcalá
Actualmente, la película dirigida por Anna Kendrick tiene una puntuación del 92% en Rotten Tomatoes tras su estreno en cines seleccionados. Sin embargo, tras su llegada al streaming, podría aumentar aún más. La evaluación de la crítica sobre el trabajo de la actriz es bastante prometedora. “La imagen de Kendrick como actriz no está necesariamente ligada a un material oscuro y tenso, pero como directora demuestra su talento para crear escenas de suspenso hitchcockiano junto a su ingenio característico”, afirmó la crítica de IndieWire, Katie Rife.
Por su parte, el New York Post destacó: “Nada gusta más en Hollywood que una historia real sobre un asesino en serie, pero la nueva película dirigida por Anna Kendrick le da una vuelta de tuerca a ese género tan conocido”. Woman of the Hour ya se encuentra disponible en el catálogo de Netflix.
