
El nuevo libro de Roderick Beaton, titulado Los griegos, explora la profunda influencia de la lengua y la cultura griega a lo largo de los siglos, destacando su relevancia en la historia y su conexión con la identidad nacional. En 1963, el poeta griego Yorgos Seferis, al recibir el Premio Nobel de Literatura, reflexionó sobre el significado de este galardón, señalando que no solo era un reconocimiento personal, sino también un homenaje a la lengua griega, que ha perdurado a lo largo de los siglos. Seferis afirmó que el idioma griego es “famoso a lo largo de los siglos, pero muy extendido en su forma actual”, lo que subraya la conexión entre el pueblo griego y su lengua, un vínculo que ha perdurado por más de 3.500 años.
La influencia del griego a través de la historia
El libro de Beaton se centra en cómo el griego, en sus múltiples formas y dialectos, se convirtió en una lengua de alcance global, especialmente durante la época helenística. Su influencia se extendió desde las montañas Hindu Kush, en el actual Pakistán, hasta el sur de Francia. Este vasto territorio dejó huellas culturales que persisten hoy en día, como los nombres de ciudades emblemáticas: Alejandría, Nápoles y Niza, todas marcadas por la impronta de aquella civilización.
Un ejemplo destacado de esta influencia es la Septuaginta, una traducción griega de la Biblia hebrea realizada entre los siglos III y II a.C. en Egipto. Este texto surgió para satisfacer las necesidades de los judíos egipcios que, al haber perdido el dominio del hebreo, requerían una versión comprensible de las escrituras. En este contexto, “comprensible” significaba griego.
Impacto cultural del idioma griego
El impacto cultural del idioma griego ha sido significativo en diversas áreas, incluyendo la arquitectura, las instituciones políticas y las tradiciones académicas, que han dejado una marca indeleble en el mundo. Beaton destaca que “los griegos han llegado prácticamente a todas partes”, subrayando su capacidad de influir en las culturas con las que han interactuado. Este hilo conductor conecta a los hablantes de griego a través del tiempo y el espacio.
La perspectiva de Beaton permite analizar la evolución del griego desde la antigüedad hasta la actualidad, pasando por momentos históricos clave como la interacción con los hititas en el segundo milenio a.C., la diversidad del mundo helenístico, el cristianismo temprano, el Renacimiento bajo el dominio veneciano y otomano, y la Europa moderna. En cada etapa, se ha demostrado una notable adaptación del idioma, transformándose en función de las circunstancias históricas y culturales.
Identidad y nacionalismo en Grecia
Una de las cuestiones fundamentales que Beaton aborda es la definición de lo que significa el nacionalismo, que tiende a vincularse con la identidad religiosa ortodoxa ancestral que hoy constituye Grecia. Sin embargo, el autor propone una visión más amplia y flexible, reconociendo las diversas identidades que se han adoptado a lo largo de la historia. Esto refleja la complejidad y riqueza del legado cultural griego, tal como lo expresó Seferis: “Grecia es un país pequeño, pero con una tradición inmensa”.
Seferis, quien también es un tema recurrente en la obra de Beaton, reflexionó sobre los desafíos que enfrentaba Grecia en la modernidad. Tras regresar en 1962, después de décadas como diplomático, Seferis se sintió profundamente afectado por los cambios que observó, especialmente en relación con el turismo nacional. En un sueño que tuvo durante el verano, imaginó una multitud en la Acrópolis asistiendo a una subasta en la que el gobierno vendía el Partenón al mejor postor, un empresario estadounidense de pasta dental. Aunque esta situación era ficticia, resultó inquietantemente profética.
En 2010, durante la crisis financiera griega, dos políticos alemanes sugirieron que Grecia podría saldar sus deudas vendiendo monumentos antiguos e islas, lo que provocó una ola de indignación y un boicot a los productos alemanes. Estas tensiones plantean preguntas sobre el pasado y el presente de Grecia: ¿quién es el dueño de lo griego? ¿Cómo se define lo moderno? Y, en última instancia, ¿quiénes son los griegos?
Análisis histórico y lingüístico
El análisis histórico y lingüístico que ofrece Beaton proporciona respuestas que subrayan la continuidad de la obra griega, capturando la esencia de un constante movimiento, adaptándose y redefiniéndose a lo largo del tiempo. Tal como Seferis expresó: “está viajando, siempre viajando”. Este dinamismo, combinado con una arraigada tradición, ha permitido a la cultura griega dejar una huella imborrable en la humanidad. Así, el testimonio de esta herencia y la exploración exhaustiva de su historia siguen siendo tan relevantes hoy como lo fueron en el pasado.