La cantidad de víctimas mortales en la provincia de Valencia (España) a causa de la devastadora dana ha aumentado este sábado hasta las 210, según el último recuento facilitado por el Centro de Emergencias de la Generalitat. Este nuevo balance representa un incremento de ocho personas fallecidas en comparación con el recuento anterior, que se estableció en 202 personas el día viernes. Es importante señalar que este número sigue siendo provisional, ya que el proceso de levantamiento e identificación de los cadáveres continúa en marcha, en el marco del procedimiento de múltiples víctimas que se activó desde el martes por la noche.
Rescate de una mujer atrapada
En medio de esta tragedia, Protección Civil ha informado que una mujer fue rescatada con vida tras haber estado atrapada durante tres días en el interior de un coche que había quedado sumergido en un paso subterráneo en Benetússer. Este rescate se produce en un contexto de creciente preocupación por la seguridad de las personas afectadas por las inundaciones.
Identificación de los fallecidos
Los cuerpos sin vida de los primeros fallecidos por la dana que han sido identificados llegaron este sábado a uno de los pabellones de Feria Valencia, un recinto que está bajo la custodia de los militares de la UME y la Policía Nacional. Este proceso de identificación es crucial para proporcionar respuestas a las familias de las víctimas y para llevar a cabo los procedimientos necesarios en situaciones de emergencia.
Solidaridad y críticas
Mientras tanto, la ola de solidaridad se ha manifestado con miles de personas que se han desplazado a las zonas más afectadas por las inundaciones en la Comunitat Valenciana. Sin embargo, esta respuesta ha estado acompañada de críticas debido a la falta de efectivos que aún no han llegado a las áreas más necesitadas.
El desfile de voluntarios que diariamente se trasladan al sur del área metropolitana de València para ayudar en la limpieza y recuperación de las zonas afectadas ha crecido. Estos voluntarios, armados con palas, escobas y rastrillos, ahora también utilizan guantes y mascarillas, elementos esenciales para protegerse de los posibles problemas sanitarios que pueden surgir debido al agua estancada.