El rapero y empresario Sean Diddy Combs ha presentado una carta de cese y desista en relación con un nuevo documental que aborda la vida de su antiguo protegido Shyne, quien actualmente se encuentra en prisión en Brooklyn enfrentando cargos de tráfico sexual y crimen organizado. Fuentes cercanas tanto a Combs como a la producción del documental han confirmado el envío de esta carta, aunque han aclarado que el objetivo no es impedir el lanzamiento del filme, producido por Andscape y ESPN, sino más bien “asegurar” la precisión de los hechos que se narran en el mismo.
El documental, que se centra en la vida de Jamal Barrow, conocido artísticamente como Shyne, incluye afirmaciones de que se convirtió en un “chivo expiatorio” en relación con un incidente que ocurrió en 1999 en un club nocturno de Manhattan, donde tres personas resultaron heridas durante un tiroteo. Shyne cumplió ocho años de prisión tras ser declarado culpable de agresión y poner en peligro imprudente, aunque fue absuelto de otros cargos. En el documental, Shyne declaró: “Cuando lo dije ese momento, todos estaban fiesta pasándolo bien yo me pudría”. Además, afirmó que “consiguió testigos para declarar en mi contra para decir básicamente que era una persona incontrolable que actuaba de manera depravada”.
Los representantes de Combs han respondido de manera categórica a las afirmaciones de Shyne, negando las alegaciones y cualquier sugerencia de que Combs orquestó que Shyne “cargara la culpa” o “sacrificara” a otros para que testificaran en su contra. En este sentido, los representantes afirmaron: “Estas afirmaciones son inequívocamente falsas”.
Shyne, quien fue deportado a su país natal, Belice, en 2009 tras su liberación, ha transformado radicalmente su vida. Después de convertirse al judaísmo ortodoxo y visitar Israel en 2010, regresó a Belice en 2013 y actualmente se desempeña como líder de la oposición en la Cámara de Representantes, liderando el Partido Democrático Unido de Belice.
En cuanto a Combs, se está evaluando su fianza de 55 millones de dólares, mientras permanece bajo custodia del juez federal Arun Subramanian, quien considera la solicitud de libertad bajo fianza de 50 millones de dólares para arresto domiciliario. Anteriormente, jueces le habían negado la libertad condicional citando riesgos de manipulación de testigos. La defensa ha propuesto un paquete respaldado por una mansión en Florida, valorada en 48 millones de dólares, junto con un monitoreo de 24 horas por personal de seguridad y la prohibición de contacto con las presuntas víctimas.
Durante la audiencia, el abogado defensor Marc Agnifilo disputó la afirmación de los fiscales sobre un video de vigilancia de 2016 que muestra a Combs agrediendo a su novia Cassandra Ventura, conocida como Cassie, argumentando que hay “cero posibilidades” de que eso vuelva a suceder. Christine Slavik, la fiscal asignada al caso, reveló que se había buscado sobornar a un hotel para eliminar imágenes de vigilancia. Además, se informó que, incluso desde la cárcel, Combs intentó comunicarse con sus abogados a través de canales autorizados para ejecutar una campaña en redes sociales con el fin de influir en potenciales jurados.
Las autoridades han señalado que los agentes federales recuperaron rifles con números de serie alterados en las residencias de Combs. Las acusaciones en su contra incluyen abusos que involucraban hacer que mujeres participaran en actuaciones sexuales grabadas, conocidas como “freak offs”, y que en ocasiones eran transportadas a través de fronteras estatales. En su comparecencia, vistiendo un uniforme carcelario beige, Combs envió besos a su familia, que se encontraba sentada en la segunda fila de la sala del tribunal. El juez indicó que dictaminará “con prontitud” sobre la solicitud de detención domiciliaria del magnate musical.