Rodrigo González rinde homenaje a su madre con párkinson y reflexiona sobre el cuidado y la despedida

Rodrigo González comparte su experiencia cuidando a su madre con párkinson.
Rodrigo González comparte su experiencia cuidando a su madre con párkinson.

El comediante Rodrigo González compartió recientemente una conmovedora imagen en su cuenta de Instagram, rindiendo homenaje a su madre de 84 años, quien padece de párkinson, una enfermedad que provoca movimientos involuntarios. Desde el año 2000, la madre de González ha estado diagnosticada con este trastorno neurológico, el cual ha ido empeorando con el tiempo. En la descripción de la publicación, González expresó: “Ella es mi madre. Tiene párkinson. Está postrada. No puede caminar. Perdió el equilibrio. No puede caminar. Andar. Algo tan simple y tan complejo a la vez. No se queja, lucha”, mientras la imagen mostraba a su madre sonriendo.

La enfermedad de la madre de Rodrigo González

En una entrevista con Las Últimas Noticias (LUN), Rodrigo González comentó sobre el impacto que tuvo esta imagen en sus seguidores de Instagram, quienes respondieron con numerosos ‘me gusta’ y comentarios positivos, elogiando sus emotivas palabras. González también reveló que ha sido el cuidador de su madre desde el año 2016.

El comediante compartió: “Son tantos años que ya es parte de mi vida, no soy esclavo de eso, porque mi mamá no se queja nada, es súper fuerte. Ve tele, le doy los remedios. Ahora está con una enfermera que la cuida y que se va más tarde. Cotidianamente, no es terrible, lo terrible es ver cómo se va deteriorando la persona, como se va apagando, como se va achicando, como se va encogiendo en sí misma”.

Reflexiones sobre el cuidado y la despedida

A lo largo de los años cuidando a su madre, Rodrigo González ha sentido que no hay asuntos pendientes entre ellos. En su relato, mencionó: “He tenido tiempo para despedirme. Mi papá murió en 2010, de cáncer, y también lo cuidé hasta el final. Tanto con él como con mi mamá, no tengo nada pendiente. Todo lo que había que hablar con ella, lo hablé”.

González reflexionó sobre la experiencia de cuidar a un ser querido, afirmando: “Lo bonito de cuidar a un ser querido es que tienes tiempo de despedirte. Mi viejo murió, lo lloré, pero no me quedé con nada adentro. Y con mi vieja tampoco. Nunca me quedará la sensación de que podría haber estado”.

La situación de Rodrigo González y su madre resalta la complejidad emocional y los desafíos que enfrentan aquellos que cuidan a familiares con enfermedades degenerativas como el párkinson.