
La controversia en torno a la coronación de Fátima Bosch como Miss Universo 2025 se intensifica tras la revelación de que Raúl Rocha Cantú, propietario del certamen, enfrenta una orden de aprehensión y se ha acogido al programa de testigos protegidos de la Fiscalía General de la República (FGR). Esta información fue divulgada por el periodista Carlos Loret de Mola, lo que ha avivado aún más el debate sobre la legitimidad del concurso de belleza.
La edición número 74 del certamen ha estado marcada por acusaciones de fraude, especialmente tras la victoria de Fátima Bosch. Según Omar Harfouch, se alega que la mexicana ganó gracias a un acuerdo entre su padre, Bernardo Bosch, y Raúl Rocha. Sin embargo, estas acusaciones no han sido confirmadas ni por el certamen ni por las autoridades competentes.
En medio de esta polémica, la Miss Costa de Marfil también ha renunciado a su título debido a cuestionamientos sobre su padre, el alcalde de Cocody, quien ha sido señalado por llevar una vida de lujos que contrasta con la situación económica de su comunidad, además de estar involucrado en presuntos negocios irregulares.
Loret de Mola ha informado que la situación legal de Raúl Rocha Cantú es grave, ya que se acogió al programa de testigos protegidos tras la emisión de una orden de aprehensión en su contra por delitos relacionados con huachicol y tráfico de armas. La orden fue emitida el 15 de noviembre y el acuerdo para convertirse en testigo colaborador se formalizó el 19 de noviembre.
La FGR está investigando una organización vinculada a Raúl Rocha por tráfico de combustible desde Guatemala y el suministro de armas a grupos criminales, incluyendo el Cártel del Golfo y el Grupo Sombra de Veracruz. Loret de Mola ha prometido ofrecer más detalles sobre este caso en sus próximas transmisiones.



















