Quito enfrenta una emergencia por cinco incendios forestales, con humo y ceniza que obligan a suspender clases. La situación es crítica y urgente.
Quito enfrenta una grave crisis debido a cinco incendios forestales que han llevado a la declaración de emergencia en todo Ecuador. La capital ecuatoriana se encuentra sumida en una densa capa de humo y ceniza, lo que ha obligado a las autoridades a suspender las clases presenciales en la ciudad.
El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, ha informado que se han desplegado cinco grupos de bomberos para combatir las llamas, describiendo la situación como crítica y advirtiendo que no se espera una pronta resolución. En la lucha contra el fuego, están operando tres helicópteros, tanto de las Fuerzas Armadas como de los bomberos, que trabajan intensamente para controlar la situación.
La emergencia ha llevado al presidente de Ecuador, Daniel Noboa, a cancelar su participación en la Asamblea General de la ONU que se lleva a cabo en Nueva York. Desde allí, el presidente ha ordenado a las Fuerzas Armadas que intervengan en la crisis y ha anunciado su regreso a Quito para supervisar la situación de cerca. Noboa ha expresado en su cuenta de X que el país está atravesando “la peor coyuntura climática en décadas”, lo que requiere decisiones urgentes a todos los niveles de gobierno. Además, ha advertido que aquellos responsables de provocar los incendios serán tratados como “terroristas”.
Los habitantes de Quito han reportado la caída de cenizas en diversas áreas, incluyendo la zona norte de la ciudad y el centro histórico. En respuesta a la crisis, la empresa eléctrica local ha suspendido los racionamientos de energía y ha desconectado tres subestaciones que se encontraban en riesgo debido a la proximidad del fuego.