La actriz Pamela Anderson compartió en una reciente entrevista con la revista The Sunday Times Style detalles sobre los traumas que sufrió durante su infancia, a pesar de haber crecido en un entorno familiar que, en apariencia, era amoroso y seguro. A sus 57 años, Anderson habló abiertamente sobre la complicada relación que tuvo con sus padres, Barry y Carol, quienes enfrentaron dificultades para criar a sus hijos en un ambiente seguro y cariñoso. En 2014, la actriz había revelado que fue víctima de abuso sexual en su niñez, siendo violada a los 12 años por un grupo de hombres, lo que sorprendió a muchos durante su discurso en el Festival de Cine de Cannes.
En sus propias palabras, “No tuve una vida fácil. A pesar de tener padres amorosos, fui niñera desde los seis años”, comentó la actriz al lanzar su fundación hace una década. Anderson recordó un episodio en particular: “Fui a la casa del novio de una amiga, el hermano mayor decidió enseñarme a jugar al backgammon, lo que derivó en un masaje en la espalda y terminó en una violación. Mi primera experiencia heterosexual. Tenía 12 años; él, 25”. Además, mencionó que en la escuela, “decidió que sería divertido violarme frente a sus amigos. Quería salir de este mundo”.
La madre de Pamela, Carol, expresó su conmoción al enterarse de las declaraciones de su hija. “Esto es un shock total. Es algo terrible y dramático que le sucedió. Es horrible que haya tenido que pasar por eso sola”, dijo. Carol, quien trabajaba como mesera en un restaurante cuando sus hijos eran pequeños, admitió que no tenía conocimiento de lo que había ocurrido hasta que recibió un correo electrónico de Pamela contándole sobre el abuso. Desde entonces, madre e hija no han hablado ni por teléfono ni en persona. “Fue tan sorprendente para mí y para todos, especialmente porque crees que estás cerca de tus hijos”, lamentó Carol, quien ha estado luchando contra el cáncer de ovario.
En la misma entrevista, Pamela Anderson también habló sobre su decisión de dejar de usar maquillaje, que surgió de manera espontánea durante la Semana de la Moda de París 2023. “Simplemente fue una cosa tonta decir: ‘No voy a sentarme en una silla tres horas. Voy a ir al Louvre'”, relató. La actriz afirmó que se siente más auténtica que nunca en esta nueva etapa de su vida, alejada de los reflectores de Hollywood. “Somos suficientemente buenos tal como somos. Tengo que recordármelo todos los días”, afirmó.
Este cambio en su vida ha tenido un impacto positivo en sus hijos, Brandon y Dylan, quienes, según ella, probablemente ya sienten que tienen que defenderse. “Cuando miro mi pasado, pienso que tenía control”, reflexionó la actriz, quien fue considerada un “símbolo sexual” en su juventud y ahora se refiere a su personaje como una caricatura.
Alejada de Hollywood, Pamela Anderson se mantiene activa en diversos proyectos. Su próxima película, Last Showgirl, dirigida por Gia Coppola, narra la historia de una bailarina experimentada que enfrenta un momento crucial en su vida tras el cierre del espectáculo en el que ha trabajado durante décadas. Además, promociona su nuevo libro de cocina vegana titulado I Love You: Recipes from the Heart, que sucede a sus memorias Love. Por otro lado, ha encontrado paz en una granja familiar centenaria en Isla Vancouver, donde dedica su tiempo a caminar, leer y cocinar.
