Estudio revela las razones detrás de las peleas familiares en la actualidad

Un estudio revela las causas del aumento de conflictos familiares en la actualidad.
Un estudio revela las causas del aumento de conflictos familiares en la actualidad.

Familias del siglo XXI enfrentan conflictos comunes, desde la comunicación hasta las tareas del hogar. Un estudio revela las luchas persistentes entre padres e hijos.

En un contexto donde las familias parecen estar cada vez más conectadas a través de la tecnología, persisten desafíos en las relaciones interpersonales. Una reciente encuesta realizada a 593 padres con hijos de entre 4 y 17 años ha revelado que los puntos de conflicto son bastante familiares. Para las parejas, la comunicación se posiciona como el principal tema de discordia. Además, surgen disputas sobre el estado de ánimo, la crianza de los hijos, la gestión del dinero y la distribución de tareas domésticas, como quién debe sacar la basura.

Allen Barton, coautor del estudio y profesor asistente en el Departamento de Desarrollo Humano y Estudios Familiares de la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign, comentó sobre la evolución de las relaciones en los últimos 50 años, señalando que “han habido cambios culturales y tecnológicos masivos”. Sin embargo, a pesar de estas transformaciones, las parejas continúan discutiendo sobre los mismos temas. Esto sugiere que existen aspectos fundamentales que son necesarios para que una relación romántica perdure.

En cuanto a los adolescentes, se ha observado que el uso de teléfonos móviles ha añadido una nueva dimensión a los conflictos tradicionales relacionados con las tareas del hogar y el desorden en sus habitaciones. Sin embargo, los problemas clásicos, como los retrasos a la hora de acostarse y la obediencia a las instrucciones, especialmente en el caso de los niños más pequeños, siguen siendo las principales fuentes de enfrentamiento.

Barton destacó que “estas luchas son comunes en diferentes tipos de familias”. En el contexto de las parejas, las mujeres reportaron una mayor gravedad en los conflictos relacionados con la comunicación, el estado de ánimo y la crianza de los hijos. Esto es consistente con investigaciones anteriores que han mostrado que los hombres tienden a estar menos sintonizados con las emociones en comparación con las mujeres.

El estudio también subraya que, aunque se ha documentado ampliamente el impacto de los conflictos familiares, la mayoría de las investigaciones se han centrado en cómo los miembros de la familia gestionan las discusiones. Noah Larsen, el autor principal del estudio y estudiante graduado, observó que las líneas de conflicto a menudo son más intensas cuando involucran a los hijos. Esta intensidad se vuelve particularmente notable en temas relacionados con el dinero y la expresión de afecto, así como en la calidad del tiempo que se pasa juntos.

Los hallazgos de esta investigación, publicados en una edición reciente de la revista Journal of Family Issues, sugieren que comprender las fuentes de conflicto puede ayudar a las familias a anticipar y prepararse mejor para las disputas, resaltando que no están solas en sus experiencias.