Tragedia en Nueva Orleans: ataque durante celebraciones de Año Nuevo deja múltiples víctimas y heridos

El trágico incidente en Nueva Orleans deja 10 muertos durante las celebraciones de Año Nuevo.
El trágico incidente en Nueva Orleans deja 10 muertos durante las celebraciones de Año Nuevo.

Un ataque ocurrido en Nueva Orleans durante las celebraciones de Año Nuevo dejó un saldo de 10 personas muertas y más de 35 heridas. El hecho tuvo lugar en la icónica calle Bourbon del Barrio Francés, un área conocida por su vida nocturna y la afluencia de turistas. Ocurrió alrededor de las 3:15 a.m. del miércoles, cuando un hombre condujo intencionalmente una camioneta a gran velocidad para atropellar a la multitud que celebraba la llegada del nuevo año, reportó NBC News.

Según informó Anne Kirkpatrick, superintendente del Departamento de Policía, el atacante atravesó barricadas de seguridad y recorrió varias cuadras, atropellando a personas antes de abrir fuego contra los oficiales. La policía respondió disparando al atacante, quien murió en el intercambio de tiros.

Se ha enfatizado que el sujeto, cuya identidad no ha sido revelada públicamente, intentaba causar el mayor daño posible, añadiendo que sus acciones fueron deliberadas y el resultado de conducir bajo los efectos de sustancias. Dos agentes resultaron heridos por disparos, aunque se encuentran estables. Las autoridades locales y federales, lideradas por el FBI, están investigando los motivos detrás del ataque. Se hallaron posibles explosivos improvisados cerca de la escena, aunque no se ha confirmado si estaban vinculados o eran parte de un plan mayor. Las fuerzas continúan analizando el vehículo en busca de pistas.

En cuanto a las reacciones oficiales, la respuesta gubernamental de la alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, calificó el incidente como un “ataque terrorista” en sus primeras declaraciones. El FBI, por su parte, indicó que aún no clasifica oficialmente el ataque de esa manera, pero confirmó que investiga un “acto de terrorismo”. El gobernador de Luisiana, Jeff Landry, lo describió como “un acto de violencia horrible” y expresó sus condolencias a las familias de las víctimas. “Mi esposa y yo estamos orando por todos los afectados y por los primeros respondedores que enfrentaron esta tragedia”, señaló, instando a los ciudadanos a mantenerse alejados de la zona mientras continúan las investigaciones.

El presidente Joe Biden fue informado sobre el ataque y ha mantenido comunicación con Cantrell, ofreciendo el apoyo del gobierno federal para asistir en las labores de investigación y recuperación.

Testimonios de testigos, como Jim y Nicole Mowrer, turistas de Iowa, relatan que presenciaron el ataque mientras disfrutaban de las festividades. Relataron que vieron una camioneta blanca atravesar “a gran velocidad” y poco después escucharon disparos. “Estábamos solo a una cuadra de distancia de donde ocurrió”, indicó Nicole. Los Mowrer intentaron ayudar a algunas víctimas, muchas de las cuales ya habían fallecido. “Nos acercamos a ver si podíamos ayudar, pero allí ya estaban los que respondían”, comentó Nicole. Otros describieron escenas de desesperación, corriendo por las calles en busca de refugio. “Hubo gritos y caos por todos lados”, dijo un residente que presenció el ataque desde su ventana.

El estado de atención médica es crítico, con 30 fallecidos según la información proporcionada por las autoridades, la mayoría de los cuales son residentes y turistas. Las víctimas fueron trasladadas a varios hospitales de la ciudad, entre ellos el University Medical Center, Touro Hospital, East Jefferson General Hospital y Ochsner Baptist Campus. Se han habilitado líneas de asistencia para las familias y se han desplegado equipos psicológicos para los sobrevivientes.

En el contexto de seguridad, el momento era de alta actividad en la ciudad, tanto por la inminente realización del Sugar Bowl, un importante evento de fútbol americano universitario, como por la afluencia de turistas. Se habían desplegado 300 agentes adicionales para reforzar la seguridad durante las festividades. A pesar del ataque, el evento en el Superdome estaba previsto para llevarse a cabo, con refuerzos adicionales en las medidas de seguridad. Las autoridades aseguraron que están comprometidas a garantizar la seguridad de los asistentes.

Este ataque ha reavivado las preocupaciones sobre la seguridad en eventos masivos y ha puesto de relieve las advertencias previas de agencias federales sobre el riesgo de atentados con vehículos en concentraciones de personas. Las investigaciones están en curso y se ha pedido a cualquier persona que tenga información relevante que se comunique con las autoridades de Nueva Orleans.