
Tribunal Supremo de Francia ha ratificado la condena de seis meses de prisión impuesta a Nicolas Sarkozy, ex presidente del país, por irregularidades en la financiación de su campaña presidencial de 2012. Esta pena podría ser cumplida mediante arresto domiciliario.
Esta decisión marca la segunda condena firme contra Sarkozy, quien ocupó la presidencia entre 2007 y 2012. En diciembre del año pasado, ya había sido condenado por un caso de corrupción y tráfico de influencias, por el cual cumplió parte de su pena con un brazalete electrónico entre febrero y mayo de este año.
El tribunal ha determinado que existió una financiación irregular en la campaña de 2012, que culminó con la derrota de Sarkozy ante François Hollande. Durante esa campaña, se gastaron 43 millones de euros, casi el doble de lo permitido por la legislación francesa. Para ocultar esta irregularidad, se estableció un complejo sistema de empresas y facturas falsas a través de la sociedad organizadora de eventos Bygmalion, que da nombre al caso. Varios responsables de esta sociedad, así como el director de campaña de Sarkozy y otros miembros de su partido, también han sido condenados.
Los jueces han desestimado el recurso presentado por los abogados de Sarkozy, quienes cuestionaban la composición del tribunal de apelación que lo condenó el 14 de febrero, así como otros argumentos de fondo. En su sentencia, el Supremo ha confirmado que Sarkozy, como candidato, era el responsable último de las cuentas de su campaña y que no podía ignorar el elevado gasto.
A pesar de su insistencia en la inocencia y su afirmación de que el entramado fue creado sin su conocimiento para el enriquecimiento de otros, los jueces han desestimado estas alegaciones. La condena fue inicialmente de un año de prisión, pero la apelación redujo la pena a seis meses, que ahora se convierte en definitiva.
Esta nueva condena añade un nuevo capítulo a la ya manchada reputación de Sarkozy, quien ha enfrentado condenas en tres casos diferentes, de los cuales dos son definitivos. Además, tiene otras causas pendientes. La atención se centra ahora en la financiación de su campaña de 2007, que lo llevó a la presidencia, debido a su relevancia política y a la severidad de la pena impuesta en primera instancia, que fue de cinco años.
Los jueces han ordenado su ingreso inmediato en prisión, aunque Sarkozy ha apelado esta decisión. El ex presidente fue encarcelado en la prisión de la Santé el 21 de octubre, pero fue liberado el 10 de noviembre debido a su avanzada edad.




















