Pensionados en Venezuela protestan ante la ONU por la burla del anuncio navideño de Maduro, mientras enfrentan una crisis económica severa.
Una decena de pensionados se congregaron frente a la sede de las Naciones Unidas en Venezuela con el objetivo de solicitar la mediación de este organismo ante el gobierno de Nicolás Maduro, quien ha declarado el inicio de la temporada navideña a partir del 1 de octubre. Este anuncio ha generado descontento entre los ciudadanos de la tercera edad, quienes han manifestado que las dificultades económicas que enfrentan les impiden incluso adquirir adornos para celebrar esta festividad, lo que consideran una burla por parte del mandatario.
Urimare Capote, abogada de 62 años, expresó su descontento al afirmar que “la Navidad se acabó hace unos cuantos años”. Esta declaración refleja la situación crítica que viven muchos pensionados en el país. Desde 2022, la pensión para adultos mayores en Venezuela se ha mantenido en 130 bolívares, lo que en su momento equivalía a 30 dólares, pero que actualmente se traduce en apenas 3,50 dólares. Esta cantidad es significativamente inferior al costo de la canasta básica, que se estima en 539 dólares, según datos de fuentes privadas.
Eduardo Martínez, un profesor de 71 años, también se pronunció sobre la situación, calificando el anuncio de Maduro como “una burla miserable del presidente hacia nosotros”. Martínez subrayó la gravedad de la situación al señalar que “no tenemos real (dinero) ni para comprar una leche y vamos a tener para comprar lo de los festejos navideños”.
El presidente Maduro ha defendido su postura, argumentando que la precariedad de los salarios en el país es resultado de las sanciones impuestas por Estados Unidos. Sin embargo, analistas económicos atribuyen esta crisis a años de políticas económicas inadecuadas que han llevado a la devaluación de la moneda local en un contexto de profunda recesión económica.
Nicolás Maduro fue proclamado reelecto en julio del año pasado para un tercer mandato consecutivo de seis años, en medio de acusaciones de fraude por parte de la oposición y el rechazo de los resultados por parte de Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de América Latina.
