Conocer las normas de tránsito es fundamental para evitar sanciones y asegurar la correcta renovación del permiso de circulación.
Tipos de multas de tránsito y su categorización
Las infracciones de tránsito se dividen en dos categorías principales: aquellas que son responsabilidad directa del conductor y las que están relacionadas con la patente del vehículo. Las multas que se imponen por conducir sin licencia o sin el uso del cinturón de seguridad, entre otras, son de responsabilidad directa del conductor. Por otro lado, existen multas asociadas a la patente, como las sanciones por el uso incorrecto del TAG.
Funcionamiento y obligaciones del sistema TAG
El TAG es un dispositivo electrónico que resulta esencial para la circulación en autopistas concesionadas, ya que registra el paso del vehículo y permite realizar cobros automáticos. No utilizar este dispositivo de manera adecuada o conducir sin un TAG habilitado constituye una infracción que puede acarrear consecuencias económicas inmediatas y sanciones.
Prescripción de las multas de tránsito
Las multas de tránsito tienen plazos de prescripción que varían dependiendo de si están vinculadas al conductor o a la patente del vehículo. Las multas personales prescriben un año después de haber sido cometidas. En contraste, las multas asociadas a la patente, como las relacionadas con el TAG, expiran tres años después de su anotación.
Impacto de esperar la prescripción de una multa
Esperar a que una multa prescriba puede impedir la renovación del permiso de circulación, lo cual es un requisito obligatorio para poder conducir legalmente. Esta decisión puede resultar en la imposibilidad de utilizar el vehículo de manera legal y también puede conllevar importantes costos acumulativos si se decide regularizar la situación posteriormente. Es importante considerar el pago de la multa y la renovación inmediata del permiso de circulación, en lugar de esperar la prescripción y enfrentar los costos acumulados de permisos de circulación no renovados, además de las multas por demora.
Entender y cumplir con las normativas de tránsito es crucial para evitar complicaciones legales y financieras asociadas.
