Monserrat Álvarez se despide de Chilevisión: ¿qué la llevó a este cambio inesperado?

La periodista Monserrat Álvarez se despidió de Chilevisión el 27 de diciembre, tras más de cinco años en la cadena, y se unirá a TVN para conducir el programa “Buenos Días a Todos” y el noticiero de la estación estatal.

Salida de Chilevisión

Monserrat Álvarez, quien animó por última vez el matinal de Chilevisión, expresó su decisión de cambiar de canal en un momento significativo de su carrera. En una entrevista con LUN, la comunicadora comentó sobre su repentina salida del canal de Paramount, indicando que a su edad y en esta etapa de su vida, tenía la opción de “acomodarse en el sillón y hacer lo mismo de siempre o pegarme un remezón de motivación y desafíos”.

Nuevo rol en TVN

La periodista destacó que la oportunidad de un cambio llegó de manera inesperada, afirmando: “La verdad es que no lo busqué, llegó y pensé ya, fantástico. Los cambios son necesarios, pero yo también estaba súper bien ahí (en Contigo en la mañana) y justo se dio la oportunidad”. Monserrat Álvarez también recordó su tiempo en TVN, donde había trabajado durante una década, y valoró las oportunidades que le brindó la estación. “Las oportunidades que me dio TVN de ir progresando, probando distintas facetas, fue invaluable, una escuela impresionante. Para mí es llegar a un lugar familiar”, agregó.

Relación con Julio César Rodríguez

En cuanto a rumores sobre conflictos en Chilevisión, Monserrat Álvarez desmintió haber tenido una mala relación con su compañero Julio César Rodríguez. La comunicadora compartió en sus redes sociales una reflexión sobre su experiencia en el canal, afirmando: “Te lo juro que, de partida, nuestra relación siempre fue de menos a más. En general tuvimos una convivencia muy buena, muy complementaria”.

Álvarez también recordó una conversación con Rodríguez, quien le expresó su sorpresa por su salida: “Él me dijo, ‘no puedo creer que te vayas cuando ya nos entendemos tan bien con una mirada’”. La periodista añadió que, aunque a veces tuvieron desacuerdos, estos eran “divertidos” y no se debían a rivalidades, sino a diferencias de opinión sobre ideas. “Pero fue una súper buena experiencia”, concluyó Monserrat Álvarez.