El jefe del Comando Central de Estados Unidos, Erik Kurilla, realizó una visita al sistema de defensa THAAD en Israel, un despliegue reciente que busca reforzar la seguridad ante las crecientes amenazas en la región. Durante su encuentro con el Estado Mayor israelí, encabezado por Herzi Halevi, se evaluaron las medidas de preparación regional, con un enfoque particular en el papel de Irán. Además, se anunció que Estados Unidos incrementará su fuerza militar en la región, incluyendo el despliegue de bombarderos B-52. Las tensiones en la zona se han intensificado tras las amenazas del líder iraní Ali Khamenei y las declaraciones del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu.
En medio de la creciente tensión con Irán, el general Kurilla informó el jueves que el sistema antimisiles de gran altitud de Israel había sido activado. El Terminal High-Altitude Area Defense (THAAD) es uno de los sistemas de armas más avanzados, capaz de interceptar misiles balísticos a distancias que oscilan entre los 150 y 200 kilómetros, con una tasa de éxito casi perfecta en las pruebas realizadas. En la reunión, que tuvo lugar el jueves, Halevi y el general estadounidense también discutieron aspectos regionales como parte de una respuesta más amplia en Medio Oriente.
Los bombarderos estadounidenses modelo B-52 llegaron a la región el sábado, un día después de que Washington anunciara esta acción como una señal de advertencia. “Los estratégicos Stratofortress de la 5ª Ala de Bombardeo de la Fuerza Aérea de Minot están en la zona de responsabilidad del Mando de EE.UU.“, aseguró el comando a través de sus redes sociales, refiriéndose a los países vecinos.
El viernes, Estados Unidos también anunció el envío de cazas, aviones cisterna y destructores al Medio Oriente, en un contexto de escalada del conflicto en Gaza. El líder supremo de Irán advirtió el sábado que Israel “recibirá un aplastante golpe” por sus acciones, en el marco de la alianza antiisraelí conocida como el ‘Eje de Resistencia’. Por su parte, Irán afirmó tener “más libertad de acción que nunca” y que puede alcanzar “cualquier punto” dentro de la república islámica.
Desde el estallido del conflicto en Gaza en octubre del año pasado, y tras un mes de hostilidades, Hezbollah en Líbano ha comenzado a desdibujar los tabúes que solían caracterizar la relación entre Israel y Hezbollah. En abril, Hezbollah llevó a cabo su primer ataque con cientos de drones, seguido de un segundo ataque que resultó en el asesinato de un israelí. Hassan Nasralah, líder de Hezbollah, y Ismail Haniyeh de Hamás, no han reconocido oficialmente la implicación de Teherán en estos eventos. Sin embargo, el Ministerio de Defensa de Irán confirmó haber atacado directamente el pasado fin de semana, bombardeando “plantas de fabricación de misiles y formaciones de capacidades aéreas iraníes”.