Un joven de 26 años, identificado como Luigi Mangione, es el principal sospechoso del asesinato de Brian Thompson, CEO de UnitedHealthCare, quien fue asesinado en Manhattan, Nueva York. El crimen ocurrió el miércoles, cuando Thompson se dirigía a una reunión de inversores de UnitedHealth Group, la empresa matriz de su compañía. Tras recibir disparos en la espalda y una pierna, fue trasladado al hospital Mount Sinai West, donde se confirmó su fallecimiento.
La policía de Nueva York inició rápidamente la búsqueda del agresor, aunque la tarea se complicó debido a que el sospechoso había abandonado la ciudad sin dejar rastro. Sin embargo, a pesar de las dificultades iniciales, Mangione cometió varios errores que facilitaron su captura. A diferencia del perfil típico de un sicario, Mangione tenía un historial académico destacado, habiendo sido el alumno más brillante de una prestigiosa escuela secundaria en Baltimore, y posteriormente obtuvo títulos de licenciatura y maestría en la Universidad de Pensilvania.
La familia de Mangione posee un club de campo en Maryland, así como la emisora de radio WCBM y otras propiedades inmobiliarias. Además, su padre es el propietario de la cadena de residencias de ancianos Lorien Health Services, que fue fundada por la familia.
El jefe de detectives de la policía de Nueva York, Joseph Kenny, informó que los investigadores revisaron cientos de horas de grabaciones de video de diversas fuentes para identificar al sospechoso. Según The Independent, la imagen que resultó crucial para la detención fue capturada cuando Mangione coqueteó con una empleada del hotel donde se alojó un día después del asesinato. “Estaban teniendo un momento de coqueteo y él se bajó (la mascarilla) y le dedicó una amplia sonrisa, y ese momento informal entre dos seres humanos sigue siendo en este momento la pista más significativa hasta la fecha en todo este caso”, declaró John Miller, ex subcomisario de inteligencia y contraterrorismo de la policía de Nueva York, a CBS News.
Después de que se divulgara la fotografía del sospechoso, los investigadores continuaron su labor hasta que una llamada de una trabajadora de un McDonald’s en Altoona, Pensilvania, resultó clave. La empleada alertó sobre un cliente que se asemejaba a la persona de las imágenes, que resultó ser Mangione.
Al llegar al local, los agentes detuvieron a Mangione para interrogarlo. Durante el registro, se le encontró en posesión de una pistola, un silenciador, cuatro identificaciones falsas y un manifiesto en contra de la industria sanitaria estadounidense. Un aspecto que llamó la atención de los oficiales fue que, al preguntarle si había estado recientemente en Nueva York, él comenzó a temblar por los nervios.
En la actualidad, Mangione se encuentra en prisión sin derecho a fianza en una celda de máxima seguridad en Pensilvania, aunque podría ser extraditado a Nueva York. Fuentes policiales han indicado que el sospechoso tiene un profundo desdén hacia la comunidad médica, motivado por el trato que recibió un familiar enfermo. Registros en línea indican que una de sus abuelas falleció en 2013 y uno de sus abuelos en 2017.
Tras la detención de Mangione, su popularidad en las redes sociales ha crecido notablemente, donde muchos lo han elogiado por su aparente carisma. Mientras tanto, las autoridades continúan investigando varios aspectos del caso, incluyendo el posible móvil del asesinato, si actuó solo o con ayuda, y cómo supo que Thompson llegaría al hotel a las 18:40 horas del miércoles en que ocurrió el crimen.
