Lisa Marie Presley revela su dolorosa decisión tras la muerte de su hijo Benjamin Keough

Lisa Marie Presley congeló el cuerpo de su hijo dos meses tras su fallecimiento.
Lisa Marie Presley congeló el cuerpo de su hijo dos meses tras su fallecimiento.

Lisa Marie Presley revela en sus memorias la decisión de conservar el cuerpo de su hijo Benjamin Keough durante dos meses tras su fallecimiento.

Revista People ha tenido acceso a las memorias póstumas de Lisa Marie Presley, tituladas “From Here to the Great Unknown”, que se publicarán en Chile durante la primera semana de noviembre. En estas memorias, Lisa Marie aborda varios temas, entre ellos la profunda pérdida de su hijo, Benjamin Keough, quien falleció por suicidio en 2020 a la edad de 27 años. En el texto, la heredera del Rey del Rock revela que, tras la muerte de su hijo, tomó la decisión de mantener su cuerpo en hielo seco durante un periodo de dos meses, en un dormitorio separado de su residencia en Los Ángeles. Lisa Marie menciona: “No existe ninguna ley en el estado de California que obligue a enterrar a alguien inmediatamente”.

Es relevante señalar que fue Riley Keough, la hermana de Benjamin, quien se encargó de finalizar el libro con la asistencia de grabaciones de su madre. Riley expresó que era “realmente importante” para su madre “tener tiempo suficiente para despedirse de él, de la misma manera que lo había hecho con su padre”, Elvis Presley, quien falleció en 1977 cuando Lisa Marie tenía solo 9 años.

Para poder trasladar el cuerpo de Benjamin a su hogar, Lisa Marie recibió la ayuda de un propietario de una funeraria. Ella compartió: “Tener a mi padre en casa después de su muerte fue increíblemente útil porque podía ir a pasar tiempo con él y hablar con él”. Además, Lisa Marie explicó que era necesario mantener la habitación donde se encontraba el cuerpo a una temperatura controlada. Durante este tiempo, ella reflexionaba sobre el lugar de descanso final de su hijo, considerando opciones como Hawaii o Graceland. “Eso fue en parte el motivo por el cual tomó tanto tiempo”, declaró. “Me acostumbré tanto a él, a cuidarlo y mantenerlo allí. Creo que a cualquiera le asustaría muchísimo tener a su hijo allí de esa manera. Pero a mí no. Me sentí muy afortunada de que hubiera una manera de poder criarlo, retrasarlo un poco más para poder dejarlo descansar”, continuó.

En un momento significativo, Riley y su madre decidieron hacerse tatuajes en honor a Benjamin. Lisa invitó al tatuador a la habitación donde se encontraba el cuerpo de su hijo para que pudiera observar sus tatuajes de cerca y replicarlos. Riley compartió: “He tenido una vida extremadamente absurda, pero este momento está entre los cinco primeros”.