
Kimberly Loaiza, reconocida figura del entretenimiento mexicano, ha cancelado de manera inesperada el Meet & Greet programado con sus fanáticas en Chile, lo que ha generado descontento entre sus seguidores.
Cancelación del Meet & Greet
El evento estaba previsto para este domingo, coincidiendo con un concierto que la artista iba a ofrecer en el Movistar Arena. Sin embargo, la cancelación se comunicó a los asistentes apenas una hora antes del inicio del espectáculo, sin que se proporcionaran explicaciones claras sobre la decisión. Una de las asistentes, quien se comunicó con Radio Bio Bio, expresó su frustración: “Nos avisaron una hora antes que la artista canceló. Hay muchas niñas que se quedaron llorando, niñas que venían de Perú, del norte y del sur de Chile, que estaban aquí desde las 10 de la mañana”.
Actividades de la artista durante la cancelación
Además de la cancelación, se ha denunciado que Kimberly Loaiza estuvo realizando otras actividades en el mismo momento en que debía estar recibiendo a sus fanáticas. La misma asistente mencionó: “Nosotras hemos visto por el Instagram que la artista andaba compartiendo en otros lados y no se presentó para nuestras niñas”. Esta situación ha generado un sentimiento de decepción entre las seguidoras que habían pagado por la experiencia de conocer a la influencer.
Precios de las entradas y reacciones de los padres
El costo de las entradas para el Meet & Greet era considerablemente alto, alcanzando más de $350 mil para el ticket más caro, lo que ha llevado a los padres de las afectadas a expresar su descontento. Una madre comentó: “Y ella está subiendo historias, muerta de la risa adentro en el Movistar Arena. (…) Hay mucha niña afectada”. A pesar de que se ha informado que se realizará un reembolso a los afectados, los padres han decidido tomar acciones legales, preparando una demanda colectiva ante el Sernac, el Servicio Nacional del Consumidor en Chile, en busca de justicia por la situación vivida.
La cancelación del Meet & Greet ha dejado a muchas fanáticas decepcionadas y ha suscitado un debate sobre la responsabilidad de los artistas hacia sus seguidores, especialmente cuando se trata de eventos que implican un costo significativo.