
Luego de la divulgación de conversaciones entre la diputada Karol Cariola del Partido Comunista (PC) y la exalcaldesa de Santiago, Irací Hassler, también del PC, ambas figuras políticas han ofrecido explicaciones sobre los comentarios realizados en los chats, donde se dirigían de manera despectiva hacia el Presidente de la República, Gabriel Boric, del Frente Amplio (FA), y criticaban al Gobierno.
Reacciones de Karol Cariola
La primera en pronunciarse fue Karol Cariola, quien ocupa el cargo de presidenta de la Cámara de Diputadas y Diputados. En su declaración, Cariola afirmó que había ofrecido disculpas al mandatario y expresó su descontento con la filtración de lo que calificó como un “cahuín de poca monta“. Esta expresión sugiere que consideraba la situación como un asunto trivial que no debería haber sido expuesto públicamente.
Posición del Presidente Gabriel Boric
Por su parte, el Presidente Gabriel Boric también se refirió a la controversia, señalando que tales filtraciones no lo llevarían a oponerse a sus compañeras de partido. Esto indica que, a pesar de las críticas, el Presidente busca mantener la unidad dentro de su coalición política.
Irací Hassler y la defensa de la privacidad
La exalcaldesa Irací Hassler se unió a las críticas sobre la divulgación de las conversaciones, describiéndola como una “grave vulneración a la intimidad“. En su cuenta de X, Hassler mencionó que hace dos años había entregado su celular de manera voluntaria en el marco de una investigación relacionada con Sierra Bella, y que no se había encontrado nada en su contra, reafirmando su compromiso de actuar en beneficio de la comuna.
Hassler expresó su sorpresa ante la filtración de conversaciones privadas que, según ella, no estaban relacionadas con ninguna investigación. En su mensaje, reiteró su apoyo y respeto hacia el Gobierno y el Presidente, afirmando: “El Gobierno y el Presidente cuentan como siempre con todo mi apoyo y respeto“.
Contexto de la situación
La situación ha generado un debate sobre la privacidad de las comunicaciones entre figuras públicas y la ética de la filtración de información privada. La respuesta de ambas políticas refleja una preocupación por la integridad de las conversaciones personales y la necesidad de mantener un ambiente de respeto y apoyo mutuo dentro de su partido y el Gobierno.