José Miguel Viñuela ha enfrentado un largo proceso de recuperación tras sufrir una significativa pérdida económica de aproximadamente 900 millones de pesos a causa de una estafa perpetrada por Alberto Chang. Este inversor convenció a Viñuela en 2016 para que invirtiera su capital en el Grupo Arcano, una entidad que finalmente se apoderó de sus fondos mediante un esquema de estafa piramidal. Este impacto devastador llevó al conocido animador de televisión a replantear su enfoque sobre las inversiones, lo que le ha permitido, en parte, recuperarse de la millonaria pérdida sufrida.
La nueva estrategia de inversión de José Miguel Viñuela
En una reciente conversación con lun.com, Viñuela compartió su experiencia, afirmando: “Cuando me estafaron perdí toda mi liquidez. Tenía una casa, pero empezaron a nacer los hijos y no tenía ahorros. Tuve que vender un par de propiedades para hacer caja para la educación de ellos”. Este evento marcó un punto de inflexión en su vida financiera, llevándolo a adoptar un enfoque más cauteloso y fundamentado en sus decisiones de inversión.
El animador ha decidido no volver a invertir en oportunidades que no ofrezcan garantías tangibles. En este sentido, ha comenzado a colaborar con arquitectos en proyectos inmobiliarios, lo que le ha proporcionado una mayor satisfacción y seguridad. Viñuela expresó: “Tener un activo inmobiliario es muy distinto a invertir con alguien que finalmente destina la plata a nada, como fue el caso de Arcano”.
Prioridades en la educación y la inversión
Viñuela también destacó la importancia de la educación de sus hijos en su nueva filosofía de inversión. “Vas aprendiendo a controlar la ansiedad. Al final, la educación de mis hijos empezó a estar por sobre cualquier inversión. Cuando tengo algo de lucas, lo primero que hago ahora es pagar el colegio”, comentó. Este enfoque refleja su deseo de asegurar un futuro estable para su familia, priorizando la educación sobre las inversiones arriesgadas.
El animador ha estado planificando proyectos y buscando ubicaciones para nuevas inversiones. Afortunadamente, su último proyecto inmobiliario tuvo un buen desempeño, lo que le permitió saldar deudas con el banco y continuar con sus iniciativas. Viñuela afirmó: “Hoy estamos planificando proyectos, buscando lugares. Afortunadamente a la última casa que hicimos le fue súper bien, se vendió rápido, pudimos pagarle al banco y eso nos permite seguir haciendo nuestros proyectos”.
La confianza en el sector inmobiliario
El sector inmobiliario ha demostrado ser una opción más confiable para Viñuela. “Me gusta el rubro porque me da tranquilidad y seguridad. Hay un activo que es mío, está ahí y no dependo de nadie”, explicó. Esta nueva perspectiva le ha permitido tener un control más directo sobre sus inversiones, a diferencia de su experiencia anterior con Arcano.
Viñuela también enfatizó la importancia de la gestión activa en sus proyectos. “Hay un arquitecto que ve los planos, pero me meto en todo. Y no dependo de terceros para ver si mi inversión está rentando, que fue el error de antes”, indicó. Su enfoque actual se basa en la prudencia y la seguridad, recomendando mantener el dinero en el banco y realizar inversiones seguras.
Reflexiones sobre el tiempo y la inversión
El animador también reflexionó sobre la relación entre el tiempo y la inversión. “Uno depende mucho del tiempo, que le puedas ganar al tiempo, porque mientras más tiempo tengas la propiedad a la venta, más son los gastos”, puntualizó. Este entendimiento le ha llevado a ser más estratégico en sus decisiones, buscando recuperar su inversión de manera razonable y sostenible.
Finalmente, Viñuela concluyó: “Más que buscar ganar mucha plata, que está muy difícil hoy, espero recuperar la inversión y tener una utilidad razonable. Es más lento todo porque tienes que esperar, pero la casa mientras tanto es tuya y eso me gusta mucho”. Su enfoque actual se centra en trabajar con más capital propio y minimizar la dependencia de financiamiento externo, lo que le proporciona un mayor control sobre sus inversiones.
