Hoy se llevó a cabo una nueva jornada de reuniones entre el Gobierno de Chile y la Mesa del Sector Público, donde se discutieron temas cruciales como la implementación de la jornada laboral de 40 horas, un compromiso aún pendiente.
Durante el encuentro, que se desarrolló en un ambiente de creciente inquietud entre los trabajadores, también se abordaron cuestiones relacionadas con el cuidado infantil y el ausentismo laboral. Esta preocupación se intensifica ante las declaraciones del candidato presidencial José Antonio Kast, quien ha manifestado intenciones de reducir la jornada laboral, lo que ha generado incertidumbre en el sector público.
Las negociaciones formales entre el Gobierno y la Mesa del Sector Público están programadas para comenzar el próximo lunes, con un plazo ajustado que podría extenderse hasta el martes. Esto se debe a que el proyecto de ley sobre la jornada de 40 horas debe ser presentado al Congreso en la primera semana de enero.
En Puerto Montt, el ministro del Trabajo, Giorgio Boccardo, expresó un tono optimista sobre los diálogos, aunque se defendió de las críticas de la mesa que acusaron al Gobierno de no brindar suficiente apoyo durante el escándalo de las licencias médicas.
Además de la implementación de la jornada de 40 horas, los funcionarios públicos están preocupados por las propuestas de Kast, quien ha mencionado la posibilidad de suspender la ley para pequeñas y medianas empresas (pymes) y no ha incluido en su programa ninguna referencia clara sobre este tema.
Gabriela Farías, encargada de las Secretarías del Sector Público, subrayó que la implementación de la jornada de 40 horas requiere de una planificación cuidadosa, dado que los distintos servicios tienen horarios variados, como es el caso del sector salud, lo que complicará su avance.
En la antesala de la discusión legislativa, el diputado de la UDI y miembro de la Comisión de Trabajo de la Cámara, Henry Leal, reiteró que la ley de Presupuestos no incluye el reajuste salarial que los trabajadores han solicitado.
La preocupación en el sector se ve acentuada por las declaraciones de Kast y su equipo, quienes han sido claros en su intención de reducir el tamaño del Estado, lo que podría implicar recortes de personal y la eliminación de ministerios. En general, se percibe que la visión de su equipo es más restrictiva en términos de derechos laborales que expansiva.
