El comediante Jorge Alís participó del late de Julio César Rodríguez, con quien conversó sobre psicoanálisis, humor y contingencia. Su participación en “Pero con respeto” estuvo marcada por la lucidez, la irreverencia y, por supuesto, el humor.
En una animada conversación en torno al psicoanálisis, Alís comentó que ya no le hace sentido el ejercicio terapéutico. Afirmó que es “como revolver mierda todo el rato y patinar en esos rollos”
Ante eso, Rodríguez le alabó la visión que tuvo antes del estallido social. “Hiciste un show impecable en Viña hablando de temas super contingentes y anunciando el abuso, el hastío, y varios temas más. ¿Cómo vas mirándonos, desde tu posición de comediantes, a los chilenos? Quizás más de lo que veíamos nosotros. Más de lo que veían los políticos al menos”, preguntó.
“Los políticos se hacen los boludos. Lo ven, yo creo. No sé si lo espero, porque ¿qué es mejor? ¿Un idiota que esté gobernando o una persona que esté gobernando que es perverso? ¿Perversamente idiota? Quizás el idiota es bueno, pero también ese nos va a llevar al tacho. Y el otro, uno cree que puede hacer las cosas bien, y tampoco las hace. Lo que a mí me interesa y hago es escuchar a la gente”.
Jorge Alís vendía camisas robadas a un juez en Argentina
A continuación, Julio César le consultó cómo había sido la historia sobre el psicólogo que lo instó a volcar en la comedia sus conflictos existenciales. En el relato, Jorge Alís relató su relación con el psicoanálisis y desentrañó una curiosa historia. En ella, antes de dedicarse de lleno a la actuación, vendía camisas robadas en tribunales.
“En Argentina el guardia robaba la camisa y el juez compraba la camisa robada. Era lo que estaba pasando en ese momento”, bromeó Julio César. Alís enfatizó en que son situaciones que siguen pasando. Entre risas, continuaron su diálogo.
“Un día entro a un lugar y me dicen ‘el juez te quiere ver’. Y me dice ‘¿vos sos el que vende las camisas? ¿Cuántas camisas traés?’. ‘Diez’, le digo, ‘más no puedo porque la saco de la fábrica’. ‘¿Son robadas o son truchas?’. ‘Son robadas’, le dije yo, porque si decís la verdad son tres años menos, jajaja”.
Ver: Pensiones de Fuerzas Armadas son 3 a 6 veces mayores que las de las AFP
“Colaborando con la investigación, el hombre sabe”, respondió Julio César entre risas.
Alís: “Claro, colaborando con la investigación. ‘Ya, dame las diez’, me dijo el juez”.
Julio César: Prefería que fueran robadas a truchas. Trucha inaceptable
Alís: “Entonces me dijo: ‘lo único que te voy a pedir es que esto no se lo digas a nadie’”.
Julio César: “Ni menos en la televisión“.
“Pero boludo”, le respondió Alís entre las carcajadas de ambos y del equipo en el set.
El psicólogo que puso a Jorge Alís en la comedia
“El sicólogo no entendía por qué yo pensaba tantas pelotudeces”, comenzó diciendo el actor. “El sicólogo era maravilloso. Yo ya hacía cosas de stand up, no sé si stand up en Argentina, pero hacía humor”
Julio César: “Perdón. Él te dice directamente que, si realizas todo esto que me vienes a decir a mí, es un espectáculo. ¿Te lo dijo a ti directamente?”
Alís: “Claro. De hecho, lo hice. El espectáculo se llamaba Ya Se lo Dije, Doctor. Yo le contaba al loco cosas. ‘Me pasó una cosa. Me separé. Y fui a buscar la maleta a la casa. Y dije ‘¿qué hago? ¿La pongo o saludo primero?. Si saludo primero, significa que me tengo que quedar. Me va a decir ‘quédate’, y yo me iba a quedar. Si pongo la maleta adentro, es ‘me voy, y me voy’. Y la miré, puse la maleta, la miré si ella me quería mirar, si me estaba mirando…’
“Y me dijo ‘¿tú piensas todas esas pelotudeces?’. ‘Sí’. ‘¿Y por qué no las escribes?. Porque yo creo que eso lo piensa todo el mundo, pero no gráficamente. Yo siento que vos me estás graficando la idiotez humana en la cabeza, un TOC…’ Y empecé a salir de la angustia”.
Mira el capítulo completo aquí: