La próxima vez que aplique su perfume favorito, podría estar expuesto a riesgos para la salud asociados con los ftalatos, un grupo de sustancias químicas que se encuentran en muchos productos de cuidado personal, incluyendo perfumes, champús, lociones, esmaltes y lacas de uñas. La preocupación por los efectos de los ftalatos ha crecido entre los científicos, quienes advierten sobre sus posibles implicaciones para la salud.
Prohibiciones y regulaciones
En Estados Unidos, se han implementado prohibiciones sobre ciertos tipos de ftalatos en productos destinados a niños, como juguetes, chupetes y biberones. Sin embargo, estos compuestos continúan presentes en productos de uso diario para adultos, donde se utilizan principalmente como fijadores para prolongar la duración de las fragancias.
Estudios sobre los efectos de los ftalatos
Un análisis publicado en JAMA Network Open reveló que las concentraciones elevadas de ftalatos en orina están asociadas con un aumento del 25 % en el riesgo de problemas de hiperactividad en adolescentes. Otro estudio relacionado encontró que una mayor exposición a ftalatos se correlaciona con un rendimiento académico inferior en matemáticas.
La profesora Andrea Gore, especialista en farmacología y toxicología en la Universidad de Texas en Austin, quien dirige un laboratorio enfocado en el estudio de sustancias químicas que alteran el sistema endocrino, ha señalado que las evidencias sobre los efectos de los ftalatos son lo suficientemente serias como para recomendar a las personas, especialmente a aquellas que están formando una familia o que tienen niños pequeños, que minimicen su exposición. En declaraciones al Washington Post, Gore recomendó evitar por completo las fragancias añadidas en productos como perfumes, lociones, champús, detergentes y antitranspirantes.
Impacto en el sistema endocrino
Los ftalatos son clasificados como alteradores endocrinos, lo que significa que pueden interferir con el sistema hormonal del cuerpo humano. Este sistema, que incluye glándulas como la tiroides y la hipófisis, es crucial para regular funciones que van desde el crecimiento hasta la reproducción.
Resultados positivos de cambios en hábitos
Un estudio realizado con 41 mujeres mostró resultados significativos: tras 28 días de uso de productos libres de ftalatos y parabenos, se observó una disminución en los niveles de estas sustancias en la orina, así como una reducción en la expresión de genes asociados con el cáncer en el tejido mamario.
Consejos para reducir la exposición
La Dra. Rebecca Jeun, endocrinóloga de la University of Louisville Health, sugiere que las personas se enfoquen en realizar cambios sostenibles en su estilo de vida para reducir la exposición a los ftalatos. Esto puede incluir acciones como disminuir el consumo de alimentos ultraprocesados, evitar calentar alimentos en envases plásticos y simplificar la rutina de cuidado personal, eligiendo productos que se etiqueten específicamente como “libres de ftalatos”.
Un aspecto importante a considerar es que el término “fragancia” en las etiquetas de productos a menudo actúa como un eufemismo que puede ocultar la presencia de ftalatos no declarados. La Dra. Trisha Pasricha, profesora de Medicina en Harvard, advierte que la aparición de la palabra “fragancia” en una etiqueta puede ser un indicativo de la presencia de ftalatos, aunque no siempre se mencionen de manera explícita.
Controversia sobre la seguridad de los ftalatos
A pesar de las preocupaciones, la FDA ha declarado que no hay suficiente evidencia para demostrar que los ftalatos utilizados en cosméticos sean peligrosos para la salud humana. Algunos críticos argumentan que faltan pruebas concluyentes en humanos, mientras que los científicos sostienen que los estudios realizados en animales son suficientemente convincentes.
La profesora Gore explica que si una sustancia química tiene efectos alteradores endocrinos en animales, es altamente probable que también los tenga en humanos, dado que las hormonas del sistema endocrino son estructural y funcionalmente similares entre especies.
Implicaciones a largo plazo
Los expertos advierten que los efectos de los ftalatos podrían no limitarse a la generación actual, ya que los cambios que provocan en el esperma o los óvulos podrían ser hereditarios, afectando a futuras generaciones. Gore concluye que “nadie quiere que sus nietos estén destinados a la enfermedad, una generación antes incluso de ser concebidos”.