La reciente confirmación del divorcio entre Faloon Larraguibel y Jean Paul Pineda ha generado un intenso debate en el programa Hay que decirlo! de Canal 13, donde se discutieron los retos que enfrentan muchas familias durante los procesos judiciales relacionados con pensiones y regímenes de visitas. Durante la emisión, la abogada Lya Rojas advirtió que, a pesar del fallo de divorcio, los conflictos entre Larraguibel y Pineda persistirán, ya que el exfutbolista ha anunciado su intención de tomar acciones legales respecto al régimen de visitas. “Esa es la pretensión que él tiene hoy día“, explicó Rojas, añadiendo que actualmente la custodia de los hijos está en manos de Faloon.
El panel del programa aprovechó la ocasión para abrir un diálogo más amplio sobre la responsabilidad parental. En este contexto, la animadora Pamela Díaz compartió su experiencia personal, revelando que su hija menor no ha tenido contacto con su padre en los últimos seis años. “Mi hija no ve a su papá hace seis años. Al principio sí quería verlo, pero después de mucho psicólogo, deporte y con una linda familia, no pasa nada“, comentó Díaz, enfatizando que el bienestar emocional de su hija ha sido siempre su prioridad.
Díaz también aclaró que no se opone de manera absoluta a un posible reencuentro entre su hija y su padre. “Yo no tengo ningún problema de que vean a su papá, de hecho me encantaría“, afirmó, subrayando que la condición para ello es que existan garantías formales. La animadora destacó que, si el padre no puede ofrecer apoyo económico, al menos debería contribuir a las necesidades de la niña, lo que le permitiría a ella trabajar con tranquilidad.
La presentadora aseguró que su hija, al crecer, ha llegado a comprender la situación y que pueden hablar del tema sin dramatismos. “Mi hija sabe todo muy bien, lo entiende. Nos reímos de situaciones, porque yo tengo una forma muy distinta de ver las cosas“, expresó.
Finalmente, Díaz fue clara al explicar que no permitirá visitas hasta que no haya garantías formales. “No lo ve, no sólo porque yo no quiera. Yo le transmití a los abogados y jueces los problemas que tenía. Como mamá, no se la voy a pasar hasta que un juez determine que está todo en orden. Si el juez me dice que está listo, el mismo día le paso a mi hija“, concluyó, reafirmando su compromiso con la seguridad y bienestar de su hija.
