La Cancillería de Bolivia ha denunciado ante la comunidad internacional que el expresidente Evo Morales está liderando acciones que buscan desestabilizar el orden democrático del país, en medio de protestas que han alcanzado su día número 13. Esta situación, según el Ministerio de Exteriores, no solo representa una amenaza para Bolivia, sino también para la estabilidad y seguridad de la región suramericana.
Denuncia de la Cancillería
En un comunicado oficial, la Cancillería boliviana afirmó: “Bolivia denuncia ante la comunidad internacional que están en curso en nuestro país una serie de acciones desestabilizadoras lideradas por el expresidente Evo Morales Ayma, que pretenden interrumpir el orden democrático”. Además, se alertó sobre la existencia de intereses personales detrás de las protestas, que buscan manipular la justicia y garantizar la impunidad de Morales.
Protestas y bloqueos
Los seguidores de Evo Morales han establecido un bloqueo indefinido de caminos, exigiendo al Gobierno de Luis Arce que retire los procesos judiciales en su contra por delitos como trata de personas y estupro. Los manifestantes consideran que estas acciones judiciales son parte de una persecución política. Además, están demandando soluciones a problemas económicos, como el aumento de precios de alimentos, la escasez de dólares, la irregularidad en la provisión de combustibles y el respeto a un congreso del Movimiento al Socialismo (MAS), que en 2023 declaró a Morales como “candidato único” para las próximas elecciones.
Operativos de desbloqueo y enfrentamientos
El Gobierno ha intentado responder a la situación mediante operativos de desbloqueo. El viernes, la Policía llevó a cabo un operativo en varios sectores del departamento de Cochabamba, que son cruciales para la conexión de carreteras entre el oeste y el este del país. Uno de los puntos críticos fue la localidad de Parotani, donde se produjo un enfrentamiento entre la Policía y los manifestantes, resultando en 14 agentes heridos y 44 detenidos.
Reacciones de Evo Morales
En respuesta a los operativos, Evo Morales denunció que algunos grupos de civiles llevaron a cabo ataques que calificó de “fascistas”, incluyendo la destrucción de una sede de productores de hojas de coca en Cochabamba y la agresión a uno de sus abogados, quien fue golpeado y sufrió daños en su vehículo.
Impacto económico de los bloqueos
Los bloqueos, que según la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) se mantienen en 16 zonas, han exacerbado la crisis económica en Bolivia, provocando escasez de alimentos, gasolina y diésel. En respuesta a esta situación, el Gobierno ha implementado vuelos o “puentes aéreos” para asegurar el suministro de carne de res y pollo a las ciudades de La Paz y El Alto. Además, los camiones de combustible están utilizando rutas alternas para llegar a las plantas de distribución, intentando mitigar el impacto de las protestas en la economía del país.