Una trabajadora en España fue despedida tras descubrir que su salario era inferior al de sus compañeros masculinos, lo que llevó a un tribunal a fallar a su favor por discriminación salarial. La mujer, quien ocupaba un cargo en el departamento financiero de una empresa de servicios administrativos vinculada a un banco, había estado alertando sobre las diferencias salariales durante años. Según el medio HuffPost, entre 2010 y 2017, ella recibió un salario bruto de 33.672 euros, mientras que sus colegas hombres ganaron entre 43.000 y 49.000 euros en el mismo periodo.
Además de la disparidad en los sueldos base, los incentivos también mostraron una notable desigualdad. Mientras que algunos jefes masculinos de departamento experimentaron aumentos salariales de entre el 22% y el 24%, la mujer solo recibió un incremento del 3,83%. La situación se tornó crítica en 2017, cuando, al no recibir respuesta de la empresa a sus quejas, decidió iniciar un proceso de conciliación. Fue en este contexto que accedió a las liquidaciones de su salario, evidenciando la brecha salarial existente.
La reacción de la empresa ante su actitud fue el despido, lo que desencadenó una batalla legal. El tribunal que investigó el caso determinó que las diferencias salariales no estaban justificadas por el rendimiento o las metas alcanzadas, concluyendo que las decisiones sobre salarios eran “personales y unilaterales” del director, sin un respaldo profesional adecuado. Como resultado de este fallo, la trabajadora fue indemnizada con 12.000 euros por la discriminación sufrida.