Un hallazgo medieval en Polonia: ¿qué revela la espada encontrada en el río Supraśl?

Un hombre halla una espada vikinga de 1.000 años en un río de Polonia.
Un hombre halla una espada vikinga de 1.000 años en un río de Polonia.

Un hallazgo sorprendente en el río Supraśl, en el noreste de Polonia, ha capturado la atención de arqueólogos e historiadores. En una tarde de agosto de 2022, Szczepan Skibicki, un empleado del Museo Militar Białystok, mientras disfrutaba de un baño en el río, se topó con una espada medieval que, según los expertos, data de hace aproximadamente 1.000 años. Este descubrimiento es notable no solo por la antigüedad del artefacto, sino también por su excelente estado de conservación, lo que lo convierte en un testimonio invaluable de la época medieval, posiblemente vinculado a los vikingos o a los pueblos bálticos de la región.

El descubrimiento de la espada

Skibicki, quien tiene un profundo conocimiento del río Supraśl debido a sus frecuentes visitas, se encontraba nadando en un área que anteriormente estaba cubierta de sedimentos. Sin embargo, las condiciones del agua habían permitido que el lecho del río quedara al descubierto. A una profundidad de aproximadamente 120 cm, avistó un objeto brillante. Al acercarse, pudo distinguir la forma de lo que reposaba en el lecho del río. En su relato posterior, compartió su entusiasmo por el momento, incluso gritando de alegría bajo el agua. Gracias a su experiencia y conocimientos adquiridos en el museo, actuó con rapidez, asegurando el artefacto y notificando a las autoridades correspondientes. Su formación en arqueología fue clave para garantizar que el hallazgo llegara a manos de expertos sin sufrir daños.

Análisis y antigüedad de la espada

En 2024, los análisis realizados por especialistas han determinado que la espada tiene una antigüedad que la sitúa en un contexto histórico europeo significativo: la Edad Vikinga, que se extendió desde el siglo VIII hasta el XI. Se cree que esta espada fue utilizada por guerreros de esa época, quienes realizaron numerosas incursiones en Europa, incluida Polonia. La forja de la espada data de aproximadamente 900 d.C. y presenta signos de combate, con marcas visibles de desgaste en la parte media de la hoja, lo que sugiere que sufrió golpes intensos durante batallas. A pesar de este desgaste, la empuñadura se ha conservado casi intacta, lo que demuestra la calidad de fabricación del arma, así como la preservación que ha tenido a lo largo de los siglos.

Importancia del hallazgo y proceso de restauración

Este no es el primer hallazgo en el río Supraśl. En la década de 1970, durante un proyecto de drenaje en la zona, se descubrió un artefacto similar, aunque el hallazgo reciente de 2022 tiene una importancia especial debido a la rareza de encontrar una pieza de este tipo en tan buen estado. De acuerdo con informes del Ministerio de Ciencia y Educación Superior de Polonia, solo se han hallado entre tres y cuatro espadas similares en todo el país, lo que las convierte en un hallazgo extremadamente raro.

El proceso de restauración de la espada fue delicado. Tras el hallazgo, el artefacto fue colocado en un líquido destilado para evitar su deterioro mientras se esperaba la intervención de los arqueólogos. La restauración, que llevó cerca de cinco meses, fue supervisada por el Instituto de Arqueología de la Universidad Nicolás Copérnico de Toruń, quienes se encargaron de eliminar cuidadosamente los recubrimientos mineralizados que alteraban el original. Aunque la espada se había preservado en gran medida gracias al agua, la restauración fue fundamental para su conservación completa.

En cuanto a la exposición, se planea exhibir la espada a partir del próximo mes. Se espera que sea una de las piezas destacadas en la próxima exposición, y ya se está trabajando en un artículo científico sobre el hallazgo que será publicado en 2025. Este descubrimiento no solo ha capturado la atención de arqueólogos e historiadores, sino que también representa un esfuerzo significativo por preservar un artefacto que encierra una historia particular.