Este viernes, Elizabeth La Negra Vernaci sorprendió a sus oyentes al compartir una información dolorosa en su programa radial. La conductora, conocida por su estilo y sentido del humor, reveló que recientemente fue operada para extirpar un tumor maligno. A pesar del revuelo que esta dura noticia generó, minutos más tarde la periodista agradeció el inmenso apoyo que recibió por parte de su audiencia y seguidores.
“Gracias a todos los mensajes amorosos que recibí durante todo el día, algunos absolutamente inesperados, agradezco doblemente”, dijo emocionada. En especial, resaltó el giro que tuvo la red social X (anteriormente conocida como Twitter), un espacio que ella misma calificó como poco afectuoso, pero que en esta ocasión se convirtió en un canal de cariño y solidaridad. “No caracteriza ser un lugar de amor, hoy lo fue, así que GRACIAS por acompañarme en todo esto. Los quiero”, cerró con gratitud.
El impacto del apoyo emocional
Durante su intervención, Vernaci dejó claro cuánto significaron esos gestos en un momento tan delicado. “Es lindo cuando te das cuenta de que la gente realmente está ahí para vos, sola esto”, comentó, refiriéndose al afecto que recibió. Ese respaldo emocional, incluso de personas inesperadas, le brindó fuerzas, aunque siempre presente, puede tapar la realidad de una enfermedad seria.
La sinceridad sobre su ausencia
Fiel a su personalidad directa, tardó en abordar el motivo detrás de su reciente ausencia en el programa. Ante las especulaciones en redes sociales sobre sus desapariciones esporádicas, la conductora decidió sincerarse: “¿Por qué va temprano? ¿Por estuvo un mes?”, repitió burlándose de los comentarios. Acto seguido, con tono serio, agregó: “Bueno chicos, me hice controles. Lamentablemente salieron mal. Me tuve que operar y ahora tengo que empezar quimio”.
Detalles de la operación y el tratamiento
El anuncio fue duro, impregnado de crudeza y a la vez cercano, característico de su estilo. “Es vergonzoso… matar la irreverencia”, antes de agregar rápidamente para tranquilizar a sus oyentes: “No voy a matar, morir. Pero obviamente estoy atravesando una situación compleja desde hace un tiempo, quizás vaya a estar un poquito irascible”. En una larga charla, permitió reflexionar sobre el impacto emocional que está teniendo en ella, anticipando que esa mezcla de emociones podría influir en su estado de ánimo y comportamiento.
En su monólogo, explicó que la operación a la que se sometió fue exitosa, eliminando el tumor antes de que este se expandiera a otras áreas, como los ganglios linfáticos. Sin embargo, el riesgo de reaparición obliga a someterse a controles y tratamientos. “Esto gracias a Dios salió de mi cuerpo, además, no pasó a ningún ganglio, llegó a ese lado, cuestión de prevención para que no vuelva a pasarme”, relató.
Reflexiones sobre la quimioterapia
Sobre la inminencia del tratamiento, señaló: “¿Qué pasa con la quimio? Da miedo, obvio. A nadie le gusta atravesar esto porque sabe que cada uno pasa cosas diferentes. Yo sé que es mi idea, es la primera idea que tengo”. Reflexionó sobre su vida y cómo encontrar un sentido en medio de esta situación. “Capaz me pongo muy vulnerable, seguramente, algo que yo permito. Ser vulnerable dentro de lo que hago”, reconoció con honestidad.
Consejos médicos y rutina laboral
Otro de los temas que abordó fue cómo el tratamiento podría afectar su presencia en el programa. Los consejos médicos le indicaron que debía seguir trabajando para mantener su rutina, aunque la situación es incierta. “Me aconsejaron que venga a trabajar, que quede, que esté acá, que trabaje mientras pueda… si me siento bien, vomitando, que me quede, que si tengo ganas de verlos”, explicó.
Entre los planes para sobrellevar la inevitable pérdida de cabello que acompañará a la quimioterapia, apeló a su colega Barby para que le lleve pelucas el próximo lunes y así probar diferentes estilos. “Va a ser muy fuerte”, advirtió, mencionando con una sonrisa, buscando quitarle peso a lo que, sin duda, es un desafío emocional.
Un mensaje esperanzador
Antes de cerrar, quiso dejar un mensaje esperanzador. “Lo siento transmitir que la quimio, sabe, estos efectos colaterales horribles hacen vomitar, debilitan, bajan defensas, caen pelos, son esas células que vuelven a convertirse en cancerígenas”.
