
El Ejército de Pakistán reportó el miércoles que un total de 34 personas perdieron la vida, entre ellas trece civiles, dieciséis insurgentes y cinco soldados, durante un asalto insurgente a una base militar en el noroeste del país la noche anterior.
Detalles del ataque
El ataque se llevó a cabo el martes alrededor de las 18:30 hora local, en el acantonamiento del Ejército situado en el distrito de Bannu, que forma parte de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa. Durante el asalto, los insurgentes detonaron dos vehículos cargados de explosivos con el objetivo de derribar el muro exterior de la base, lo que dio inicio a un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad. La oficina de medios del Ejército emitió un comunicado en el que se detalló que, como resultado de la explosión y del posterior enfrentamiento, murieron dieciséis insurgentes y cinco soldados paquistaníes.
Consecuencias del ataque
El Ejército informó que las explosiones provocaron el colapso parcial del muro exterior del acantonamiento, lo que causó daños a viviendas y mezquitas en las cercanías. Este incidente resultó en la muerte de trece civiles y dejó a 32 personas heridas.
Reivindicación del ataque
El grupo Jaish Al-Fursan, que está vinculado a los talibanes paquistaníes, se atribuyó la responsabilidad del ataque. En un comunicado, afirmaron haber causado la muerte a doce miembros de las fuerzas de seguridad.
Reacciones oficiales
El Ministerio del Interior de Pakistán expresó sus condolencias a las familias de los fallecidos a través de un mensaje en la red social X.
Contexto del acantonamiento de Bannu
El acantonamiento de Bannu alberga oficinas y residencias de las fuerzas de seguridad. Este lugar ya había sido escenario de un ataque similar en julio, donde murieron ocho soldados paquistaníes y diez insurgentes, un ataque que el Ejército atribuyó a otro grupo vinculado a los talibanes paquistaníes.
Situación en Khyber Pakhtunkhwa
La provincia de Khyber Pakhtunkhwa, que limita con Afganistán, junto con la provincia de Baluchistán, también fronteriza con Afganistán, es considerada una de las áreas más conflictivas de Pakistán. En los últimos años, ha habido un aumento en la violencia insurgente, especialmente desde que los talibanes tomaron el poder en Afganistán en agosto de 2021.
Acusaciones de Pakistán
El gobierno de Islamabad ha acusado a los talibanes afganos, quienes asumieron el control en Kabul, de proporcionar refugio a grupos insurgentes, una afirmación que ha sido rechazada por los talibanes afganos.
Estadísticas de violencia
De acuerdo con el último informe anual del Centro de Investigaciones y Estudios de Seguridad de Pakistán, en 2024 se registraron al menos 685 muertes de miembros de las fuerzas de seguridad en 444 ataques terroristas, lo que convierte a este año en el más mortífero para las fuerzas de seguridad paquistaníes en la última década.