Dahery Escobar: un año de lucha tras la negligencia que la dejó parapléjica en un estadio

Un año después
Un año después

Hoy, 15 de octubre, se conmemora un año desde el trágico accidente que dejó a Dahery Escobar Claure con paraplejia, tras el desplome de una pantalla gigante que impactó a los aficionados de Cobreloa en el Estadio Zorros del Desierto. Este incidente ocurrió mientras los hinchas presenciaban el ascenso de su equipo, que competía contra Rangers de Talca. En un instante, la alegría se transformó en sufrimiento para Dahery, quien recientemente cumplió 23 años, y para otros espectadores presentes en el lugar. Actualmente, ella, una de las principales afectadas, sostiene que el evento fue resultado de una negligencia.

El evento en el recinto deportivo fue organizado por el municipio de Calama, lo que ha desencadenado una serie de denuncias y una investigación por parte de la Fiscalía para esclarecer los hechos.

¿Qué pasó?

En una entrevista con El Mercurio de Calama, Dahery relató que se encontraba en la primera fila frente a la pantalla gigante cuando ocurrió el accidente, que tuvo lugar durante los últimos minutos del partido. En ese momento, había ráfagas de viento, lo que le hizo presagiar que la pantalla podría caer.

Lo último

Cuando la pantalla gigante se desplomó, la joven estudiante de ingeniería en minas se dio cuenta de que parte de la estructura había caído sobre su cuerpo, lo que le impedía respirar. “A cualquiera le puede pasar un accidente. Pero esto no fue un accidente, fue una negligencia que cometió la Municipalidad de Calama”, afirmó.

Dahery recordó que “estaba en el piso, luchando por mi vida, porque en realidad no podía respirar… No tenían ambulancia y tuvimos que esperar demasiado a que llegaran. Una vez que llegaron las ambulancias, también esperé mucho tiempo para poder salir”.

La recuperación de Dahery

Como consecuencia de este incidente, Dahery quedó parapléjica y actualmente utiliza una silla de ruedas. Se encuentra en un proceso de recuperación y adaptación a su nueva vida. “Ha sido súper complicada la situación de adaptarme a esto. La verdad es que el proceso de rehabilitación es súper lento. Todavía no he logrado hacer muchas cosas. Ser independiente. Me falta demasiado recorrido para lograr ser independiente un poco”, expresó.

En este contexto, mencionó que “actualmente estoy medicada. Estoy en el GES. No puedo vivir sin mis pastillas. Gracias a mis pastillas puedo estar bien anímicamente. No puedo dormir sin pastillas porque me dan ataques de ansiedad”.

Respecto a la respuesta del municipio, Dahery indicó que “el único aporte, o como le llaman ellos, ‘ayuda’, fue que pagaron los gastos clínicos de la clínica que estaba en Santiago y una parte de la rehabilitación. Pero una vez que los abogados presentaron la querella, se desligaron totalmente de mí. Después de eso no he recibido ningún tipo de ayuda”.

Finalmente, Dahery hizo un llamado a la Municipalidad de Calama, subrayando que los gastos que ha tenido que afrontar junto a su familia son significativos, lo que les ha llevado a recurrir a préstamos para poder cubrirlos.