La cultura otaku, caracterizada por su entusiasmo hacia el anime, el manga y los videojuegos, ha experimentado un crecimiento constante en Chile desde la década de 1990. Según Camila Gutiérrez, académica de College y de la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Católica, este grupo no debe ser visto como un ente homogéneo, sino como una comunidad diversa que se distingue por sus preferencias, su estética y la forma en que se relacionan con la cultura japonesa.
Definición y origen del término otaku
En el contexto occidental, el término otaku se utiliza para describir a los aficionados de la cultura visual japonesa, que incluye tanto el anime como el manga. “En Occidente, el término otaku se usa para definir a los fans de la cultura visual japonesa, como el anime y el manga”, comentó Gutiérrez en una entrevista con País ADN. Sin embargo, en Japón, la palabra tiene un origen más formal y abarca un significado más amplio.
El significado original en Japón
El término otaku se utilizaba originalmente como una forma educada de referirse a otra persona, equivalente a “usted” en el Keigo, que es el lenguaje formal japonés. Este lenguaje fue adoptado por los primeros aficionados al anime en la década de 1980. Con el paso del tiempo, el concepto de otaku se ha expandido y se ha popularizado en todo el mundo, incluyendo su adopción en Chile.
La evolución del término y su uso en diferentes contextos culturales refleja cómo la cultura otaku ha logrado adaptarse y crecer en diversas regiones, manteniendo su esencia mientras se enriquece con influencias locales.