La popular hamburguesa de McDonald’s, conocida como Cuarto de Libra, ha sido objeto de atención tras ser vinculada con un brote de la bacteria Escherichia Coli en Estados Unidos. Este incidente ha llevado al retiro del producto en al menos 12 estados del país.
Alerta de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades
La alerta fue emitida por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), la agencia gubernamental responsable de la salud pública. Según un informe del New York Times, hasta el momento se han registrado 49 personas afectadas, de las cuales una ha fallecido debido a los síntomas provocados por la bacteria.
Impacto del brote bacteriano
Los efectos del brote de Escherichia Coli están aumentando rápidamente, como lo indica la agencia gubernamental. De las personas que se han enfermado, la mayoría proviene de Colorado y Nebraska, y diez de ellas han requerido hospitalización. Un niño que presenta síndrome hiperumétrico ha experimentado un agravamiento de sus síntomas.
Investigación de los CDC
Durante la investigación llevada a cabo por los CDC sobre este brote, los equipos se han centrado en dos ingredientes específicos: las cebollas en rodajas y las hamburguesas de carne fresca. Según un análisis preliminar realizado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU., se ha señalado que las cebollas podrían ser una fuente probable de contaminación.
Consumo en McDonald’s
Un dato relevante recabado por los CDC y reportado por Bloomberg es que todas las personas infectadas con Escherichia Coli afirmaron haber comido en McDonald’s entre el 27 de septiembre y el 11 de octubre, justo antes de presentar síntomas de la enfermedad. La mayoría de estos individuos indicó que habían consumido el popular Cuarto de Libra.
Síntomas de la infección por Escherichia Coli
La enfermedad causada por la bacteria Escherichia Coli puede ser potencialmente mortal, y su sintomatología es variada. Los síntomas más comunes incluyen náuseas y/o vómitos, cólicos abdominales, diarrea líquida y/o diarrea con sangre, así como cansancio y fiebre. Además, la deshidratación puede estar asociada con estos síntomas.
Aunque la enfermedad generalmente se resuelve entre cinco y diez días después de la infección, en casos donde los sistemas inmunitarios están debilitados, puede haber complicaciones graves que incluyan diarrea hemorrágica, insuficiencia renal y, en situaciones extremas, la muerte, según lo detalla la Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU.