En el ámbito de la televisión, las transformaciones físicas de los actores para adaptarse a sus personajes son menos comunes que en el cine, aunque no dejan de ser fascinantes. Estas metamorfosis requieren un esfuerzo extraordinario, que puede incluir rigurosas rutinas de ejercicio y dietas estrictas, así como largas jornadas de maquillaje. Un ejemplo reciente de este tipo de transformación se observa en la serie de HBO, El Pingüino, un spin-off de la película The Batman (2022), que sigue las andanzas del villano presentado en la película, quien busca aprovechar el vacío de poder en Ciudad Gótica.
En esta serie, el actor irlandés Colin Farrell, de 48 años, interpreta al personaje de Oswald Cobblepot, conocido como el Pingüino, quien regenta un club de la mafia local. A pesar de que su aparición en la película original fue breve, Farrell consideró que sería un desperdicio no profundizar en el trabajo e interpretación que llevó a cabo para crear este personaje. Durante una conferencia de prensa internacional, el actor compartió su experiencia junto al productor ejecutivo y el diseñador protésico Mike Marino, quien también participó en la creación del aspecto del Pingüino.
El proceso de transformación
Farrell explicó que el equipo de trabajo estaba compuesto por entre nueve y diez personas, incluyendo vestuaristas y diseñadores de trajes. “Había alguien que hacía los dientes, había pelo… simplemente era extraordinario ver cómo el pueblo se unía para darle vida al personaje”, comentó el actor. En las primeras jornadas de filmación, el proceso de maquillaje y preparación tomaba horas, pero con el tiempo se logró reducir a aproximadamente tres horas por día.
La colaboración entre Farrell y Marino
Colin Farrell y Mike Marino han trabajado juntos anteriormente, lo que les permitió desarrollar una química especial. Farrell mencionó que, al entender cómo se mueve su rostro y cómo puede expresarse, el proceso de maquillaje se volvió más fluido. Marino, por su parte, destacó que el trabajo en el Pingüino fue arduo, especialmente en una escena de la primera temporada donde el personaje aparece desnudo, lo que implicó el uso de prótesis en cada centímetro de su cuerpo, incluyendo pies, piernas, estómago, espalda y cuello.
Desafíos de la producción
El maquillador relató que filmaron en plena luz del día, en un entorno implacable, lo que hizo que el proceso fuera aún más desafiante. “Tuvimos que construir un traje alrededor de la silla en la que estaba, diseñarlo de tal manera que estas prótesis se movieran como la piel humana. Si te doblas de cierta manera, se tiene que doblar de una manera extraña, así es… humano, un truco de magia”, explicó Marino.
Visión del director
El director de la serie, Matt Reeves, comentó sobre la importancia de mantener una visión coherente del universo de Ciudad Gótica. “Siempre hemos visto versiones diferentes de Gótica. Hemos tenido mundos como el de Tim Burton y la televisión original, así como el cómic. ¡Hay tantas iteraciones! Es muy único y, realmente, piensas que está construido incluso en Batman, que es táctico y realista”, afirmó Reeves. La serie busca equilibrar elementos de fantasía con una sensación de realismo.
La complejidad del personaje
Colin Farrell reflexionó sobre la complejidad de su personaje, el Pingüino, quien es un empresario de clubes nocturnos, arrogante y con un deseo de control. Farrell se adentró en la psicología del personaje, describiéndolo como alguien que, a pesar de su confianza y agresividad, es extraordinariamente vulnerable y busca amor y un lugar al que pertenecer. “Eso proyecta ira y traumas, explorando un trauma significativo de su infancia”, explicó el actor.
Referencias culturales y sociales
El Pingüino, como personaje, ha sido comparado con infames capos del crimen organizado que han trascendido hacia la cultura popular. Farrell mencionó que su interpretación se basa en la idea de que el Pingüino es un modelo a seguir en su vecindario, un ideal gánster que comprende que los políticos son corruptos y que nadie llega a la cima sin sobornos y concesiones. “Él es un verdadero representante del pueblo a través de actos ilegales, y puede canalizar dinero de vuelta al barrio para cuidar a la gente”, añadió.
Relaciones familiares y desarrollo del personaje
El actor también exploró la relación del Pingüino con su madre, describiéndola como increíblemente interesante y tóxica. Farrell destacó que esta relación alimentó el desarrollo del personaje, y que el guion reflejaba esta complejidad. “Creo que las cicatrices en su rostro cuentan una historia, y su caminar también cuenta una historia”, concluyó.
Posibilidades futuras
Finalmente, Colin Farrell dejó abierta la posibilidad de explorar más sobre el Pingüino en el futuro, sugiriendo que hay mucho más por descubrir sobre este complejo personaje en la serie.
