La reciente consagración de Central Córdoba Santiago del Estero en la Copa Argentina 2024 fue más que un triunfo futbolístico para Rafael Barrios. El defensor de 31 años no pudo contener las lágrimas tras el pitazo final del partido contra Vélez Sarsfield, donde su equipo se impuso 1-0 en el Estadio 15 de Abril (Unión Santa Fe). A pesar de la alegría por el título y la clasificación a la Libertadores 2025, el futbolista cargaba consigo una tragedia personal: la pérdida de su hijo recién nacido, Valentino. “Hoy lo jugamos mi familia, yo Valentino”, declaró con voz quebrada, visiblemente conmovido. “Nos tocó arrancar el año con desgracia y terminarlo así es inmensa, siempre busqué. Gracias Dios, angelito, me está guiando desde arriba, hoy doy”, agregó, haciendo referencia al doloroso episodio que marcó la vida de su familia a finales de 2023.
En noviembre de 2023, cuando regresaba de Carlos Casares tras la eliminación de Agropecuario en el Reducido de Primera Nacional, su esposa Rosana comenzó a presentar complicaciones en el embarazo de su segundo hijo. Los médicos recomendaron adelantar el parto, pero al nacer, Valentino enfrentó serios problemas respiratorios que obligaron a su traslado a la ciudad de Junín. A pesar de los esfuerzos médicos, el bebé falleció tres días después, dejando una profunda marca en la familia. “Fue un momento horrible de mi vida”, confesó Barrios tiempo después. Sin embargo, también destacó la importancia del apoyo emocional: “Todo lo que ocurrió deja una enseñanza, uno le toca vivir cosas así, es importante pedir ayuda. Saber que no estás solo. Apoyarse en tus amigos es muy importante”.
El fútbol se convirtió en un refugio para Barrios para superar la adversidad. Se unió a Central Córdoba y, a pesar de las dificultades, logró reinventarse bajo la dirección técnica de Omar De Felippe. “Desde la llegada de Omar, el grupo se unió mucho. Empezamos a hacer asados, a juntarnos, se formó algo increíble. Creo que el resultado es la unión del grupo”, relató el defensor, destacando el trabajo colectivo como clave del éxito.
En su camino hacia el título, Barrios ya había mostrado fortaleza emocional. Uno de los momentos simbólicos fue el gol contra Defensa y Justicia. Tras ese partido, el jugador dedicó su tanto y compartió el drama que vivía. Esa actitud reflejaba la mezcla de dolor y resiliencia que lo acompañó durante toda la temporada. La consagración de Central Córdoba en la Copa Argentina 2024 significó un hito colectivo para el club, que sigue escribiendo su historia en el fútbol argentino. Este campeonato 2025 es un reflejo del esfuerzo conjunto y de la mayor fortaleza del equipo.
