El empresario británico Foster Gillet propone financiar un nuevo estadio para Boca Juniors, mientras se debate el futuro de la Bombonera.
La Bombonera ha sido un tema de discusión constante en el entorno de Boca Juniors durante varios años. La ampliación del estadio, conocido oficialmente como Alberto J. Armando, no ha sido priorizada por los diferentes espacios políticos que han pasado por el club. Algunos sectores incluso sugieren que es momento de dejar atrás la histórica Bombonera y comenzar a planificar la construcción de un nuevo estadio. Sin embargo, bajo la presidencia de Juan Román Riquelme, esta última opción parece poco probable de concretarse.
La percepción de muchos aficionados es que la verdadera esencia de la Bombonera radica en el fervor del público y su manera de alentar, más que en la estructura física del estadio en sí. En este contexto, un empresario millonario ha mostrado interés en invertir en el fútbol argentino y ha considerado la posibilidad de financiar un proyecto que sustituya a la Bombonera, construyendo un nuevo estadio para el club de la Ribera.
Foster Gillet, un empresario británico, ha sido mencionado en varios medios de comunicación de La Plata como el potencial financiador de esta nueva obra. Gillet ha estado evaluando la posibilidad de realizar una inversión cercana a los 120 millones de dólares en Estudiantes, pero ahora ha puesto su mirada en Boca Juniors y su estadio. Su interés se ha intensificado tras su paso por Banfield, donde quedó impresionado con la idea de ser el responsable de proporcionar los fondos necesarios para la construcción del nuevo estadio, en colaboración con Juan Román Riquelme y los socios del club. Además, se ha destacado su fascinación por el proyecto presentado por Jorge Reale, quien fue candidato a la presidencia del club.
El proyecto que se ha discutido implica mantener la Bombonera en su estado actual y edificar un nuevo estadio en la isla Demarchi, con una capacidad proyectada para albergar a 112 mil espectadores. A pesar de que el proyecto ha avanzado en términos legales y de permisos, varios expertos han expresado su escepticismo sobre la viabilidad de la obra, lo que podría convertir la ambición de Gillet en un mero anhelo.
Por otro lado, Juan Román Riquelme ha dejado claro que, mientras ocupe la presidencia de Boca Juniors, el estadio Alberto J. Armando no será reemplazado. Su enfoque está en reacondicionar la Bombonera para que cumpla con los estándares de los estadios modernos y, al mismo tiempo, ampliar su capacidad para atender a la gran cantidad de socios que actualmente quedan fuera de los partidos debido a la falta de espacio. Aunque no se ha revelado un nombre específico para este plan, la intención de Riquelme es aumentar la capacidad del estadio a más de noventa mil asientos, utilizando la zona de estacionamiento, lo que evitaría la controversia histórica relacionada con la adquisición de terrenos de los vecinos adyacentes al estadio.
