Un avión de Air India que realizaba un vuelo desde Nueva Delhi hacia Chicago, en Estados Unidos, llevó a cabo un aterrizaje de emergencia en la localidad de Iqaluit, situada en las regiones árticas de Canadá, el pasado martes. Este incidente se produjo tras recibir un aviso sobre una supuesta amenaza de bomba.
El avión, un Boeing 777-300ER, realizó un aterrizaje forzoso en el aeropuerto de Iqaluit, que se encuentra a aproximadamente 2.400 kilómetros al noreste de Toronto. El aterrizaje se llevó a cabo a las 5:20 hora local (9:20 GMT). La Policía Montada de Canadá informó que las 211 personas a bordo del avión desembarcaron en Iqaluit mientras se llevaba a cabo una investigación sobre la presunta amenaza de bomba.
En un comunicado, Air India indicó que el desvío hacia Iqaluit se realizó como medida de precaución. Además, la compañía mencionó que en los días previos al incidente había recibido varias amenazas falsas contra sus vuelos. La aerolínea compartió la información a través de su cuenta oficial de Twitter, donde publicó: “#ImportantUpdate”.
Este aterrizaje de emergencia se produce en un contexto de creciente tensión entre Canadá e India. Horas antes del incidente, el Gobierno canadiense había tomado la decisión de expulsar al embajador indio, Sanjay Kumar Verma, junto con otros cinco diplomáticos de India. Esta medida se debió a su supuesta vinculación con una red criminal relacionada con el asesinato de un disidente indio en territorio canadiense, así como por otros actos delictivos.
En respuesta a estas expulsiones, India también decidió tomar medidas similares, expulsando al embajador canadiense en Nueva Delhi y a otros cinco diplomáticos de Canadá. Este intercambio de expulsiones ha intensificado las tensiones diplomáticas entre ambos países, que ya se encontraban en una situación delicada debido a las recientes acusaciones y eventos relacionados con la seguridad y la diplomacia.