Una cajera de AFP Provida en Las Condes fue tomada como rehén por un cliente insatisfecho, quien fue detenido tras varias horas de tensión.
¿Qué pasó?
La situación se desarrolló alrededor de las 13:00 horas de este lunes, cuando un cliente de la sucursal de AFP Provida en la comuna de Las Condes tomó como rehén a una cajera. El individuo, que se encontraba molesto por la atención recibida, amenazó a la trabajadora con un arma blanca. La víctima fue liberada aproximadamente a las 20:00 horas, tras un extenso operativo policial.
Detalles del incidente
Según información preliminar, el hombre, que se encontraba en una situación económica complicada, intentaba retirar el dinero que su esposa tenía acumulado por concepto de una pensión de sobrevivencia, cuyo monto asciende a cerca de $1 millón. Al no poder realizar el retiro, el sujeto optó por amedrentar a la cajera con dos cuchillos, manteniéndola como rehén durante cerca de siete horas.
Perfil del agresor
El agresor, de 55 años, no contaba con antecedentes policiales previos. Durante el tiempo que estuvo en la sucursal, mantuvo a la trabajadora bajo amenaza, lo que generó una situación de alta tensión tanto para los empleados como para los clientes presentes en el lugar.
Operativo policial
El operativo para liberar a la rehén fue llevado a cabo por el GOPE de Carabineros, quienes intentaron establecer un diálogo con el hombre para lograr su rendición y la liberación de la mujer. En el transcurso de la situación, se evacuó a los demás trabajadores de la sucursal para garantizar su seguridad y facilitar el trabajo de las fuerzas policiales.
Además, se desplegaron francotiradores en los techos de los edificios aledaños, y se contó con la presencia de personal médico en el lugar, preparado para atender a posibles heridos, aunque finalmente no se registraron incidentes de este tipo.
Conclusión del operativo
El desenlace de la situación se produjo cuando la mujer fue liberada, momento en el cual el agresor fue detenido por las autoridades. La intervención policial fue clave para asegurar la integridad de la rehén y de los demás presentes en la sucursal.