Rosanna Costa recibe el premio Clapes UC Alfonso Swett Opazo en un emotivo homenaje rodeada de su familia y colegas, destacando su trayectoria y el legado de diálogo de Alfonso Swett

Costa tras recibir el premio Clapes UC: "Estabilizar la economía es mi prioridad".
Costa tras recibir el premio Clapes UC: "Estabilizar la economía es mi prioridad".

En el aula magna Manuel José Irarrázaval de la Casa Central de la Universidad Católica, la presidenta del Banco Central, Rosanna Costa, fue galardonada con el premio Clapes UC Alfonso Swett Opazo este jueves, en un evento que reunió a familiares y amigos. Este reconocimiento, otorgado por quinto año consecutivo por el Comité Ejecutivo del Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales de la UC, distingue a un profesional destacado por su trayectoria y su contribución a la mejora de las políticas públicas en Chile. A partir de este año, el premio lleva el nombre de Swett, quien presidía el comité, en homenaje a su reciente fallecimiento.

Reconocimiento a la trayectoria de Rosanna Costa

El director de Clapes UC, Felipe Larraín, destacó la importancia de reconocer a una economista como Rosanna Costa, afirmando que “destacar a una economista como Rosanna es un gran incentivo para seguir trabajando en aquellos temas que permitan a Chile retomar el crecimiento económico”. Larraín recordó anécdotas compartidas con Costa, como su ingreso conjunto a la carrera de ingeniería comercial en 1976 y su experiencia en el Senado, donde trabajaron durante 29 horas seguidas en noviembre de 2011, cuando él era ministro de Hacienda y ella directora de Presupuestos.

Durante la ceremonia, Rosanna Costa expresó su emoción al recibir el premio, señalando que “es un momento muy especial para mí”. En el salón se encontraban su hija, su yerno, su nieto y su esposo, a quien describió como su “paciente compañero”, y mencionó que su familia es su “más profunda riqueza”.

Reflexiones sobre su carrera y el Banco Central

Al reflexionar sobre su trayectoria, Costa afirmó que el Banco Central ha sido una “segunda escuela” para ella. Recordó que durante su tiempo en la Dirección de Presupuestos, el ex presidente Sebastián Piñera no le “quitó el piso”. En su discurso, mencionó: “Quiero contarles que cuando fui la segunda mujer que llegó a la Dirección de Presupuestos, la segunda mujer que fue consejera del Banco Central, yo dije bueno, yo soy de la Católica. Después la Católica ganó varios campeonatos seguidos y pasé a ser la primera mujer del Banco Central”, lo que provocó risas entre los asistentes.

Costa también recordó que cuando asumió la presidencia del Banco Central en 2022, la inflación estaba en aumento y la tasa aún no había alcanzado su punto máximo, además de la invasión de Rusia a Ucrania. Afirmó que “la tarea no ha terminado y los desafíos están a la vista. Estoy orgullosa de la institución en que estoy y de cada uno de sus funcionarios”, y añadió que su período como presidenta “estará marcado por la necesidad de estabilizar la economía”.

Comentarios de colegas y homenaje a Alfonso Swett

En la ceremonia, estuvieron presentes varios funcionarios del Banco Central, incluyendo a la vicepresidenta Stephany Griffith-Jones, el consejero Alberto Naudon y el gerente general Luis Óscar Herrera. Sebastián Claro, ex vicepresidente del Banco Central, destacó que “en un mundo de economistas donde la dureza se cultiva como si fuese una señal de capacidad, Rosanna destaca por su cercanía y su genuino interés por los demás”. Además, enfatizó la importancia de mantener la credibilidad de la institución en tiempos difíciles.

El expresidente del Banco Central, Vittorio Corbo, resaltó la capacidad técnica de Costa y su habilidad para “construir puentes”. Por su parte, la directora de empresas, Ana Holuigue, la describió como “la mujer más influyente del mundo económico”, elogiando su “sobriedad y seriedad pública”.

La jornada también estuvo marcada por recordatorios al expresidente de la CPC, Alfonso Swett. Costa lo recordó como un “generoso servidor público con profunda vocación de diálogo”, destacando que “el diálogo es un ejercicio que requiere la valentía de abrirse a los demás y la sencillez para recibir lo que ellos quieren expresarnos”. Claro lo recordó como alguien “siempre alegre y optimista”, mientras que Corbo mencionó su compromiso social y cercanía con los trabajadores, señalando que “la prueba fue que en su funeral había una impresionante corona de los trabajadores.”