La obispa Mariann Budde, líder espiritual de la Diócesis Espiritual de Washington, ha captado la atención de los medios tras su emotiva oración por la clemencia hacia los migrantes y el colectivo LGBTIQ+ durante la ceremonia religiosa posterior a la toma de posesión del presidente Donald Trump.
Contexto de la ceremonia religiosa
La ceremonia tuvo lugar en la Catedral Nacional de Washington, un evento que se ha convertido en una tradición desde 1993. Budde, nacida en Nueva Jersey en 1959, se convirtió en la primera mujer en liderar esta diócesis. Durante su intervención, la obispa hizo un llamado a la compasión y la misericordia, dirigiéndose directamente a Trump con un ruego: “En el nombre de Dios, le pido que se apiade de la gente de nuestro país que ahora tiene miedo”.
Mensaje a Trump y a la comunidad
Budde expresó su preocupación por los niños transexuales y las personas migrantes que, según ella, “temen por sus vidas” tras la llegada de Trump al poder. En su discurso, destacó que “hay niños transexuales tanto en familias republicanas como demócratas que temen por sus vidas”, y añadió que muchos inmigrantes, aunque no tengan la documentación adecuada, “no son delincuentes, pagan impuestos y son buenos vecinos”.
Preparativos previos a la ceremonia
Según informes, Budde ya sabía que su diócesis sería responsable de la misa posterior a la toma de posesión desde antes de las elecciones de noviembre. Se preparó para este evento, anticipando la llegada de Trump a la Casa Blanca.
Críticas anteriores a Trump
Esta no es la primera vez que la obispa Budde critica al expresidente. En 2020, durante su primer mandato, Budde se pronunció en contra de Trump tras una misa en honor a George Floyd, un hombre afroamericano cuya muerte a manos de un policía desató el movimiento ‘Black Lives Matter’. En esa ocasión, Budde lamentó que Trump no mencionara a Floyd ni la “agonía de las personas sometidas a esa horrible expresión de racismo y supremacía blanca”, afirmando que “necesitamos un presidente que pueda unificar y curar, y ha hecho todo lo contrario”.
Vida personal y trayectoria de Mariann Budde
Mariann Budde proviene de una familia con raíces suecas, ya que sus abuelos maternos eran de Suecia y su madre emigró a Estados Unidos cuando era joven. Es la menor de dos hermanas, está casada con Paul Budde y tiene dos hijos, Amos y Patrick. Desde su infancia, Budde ha estado involucrada en la comunidad religiosa, y en su autobiografía menciona haber atravesado una crisis de fe que superó, siendo aceptada para postular a las órdenes sagradas a los 24 años.
Budde ha entendido su fe como un compromiso político y social, dedicando su primer año de matrimonio a trabajar como voluntaria en una escuela-hogar para niños abandonados en Honduras.
Reacción de Trump
Tras la ceremonia, Trump calificó a la obispa de “desagradable” y exigió que se disculpara por sus declaraciones a través de la red Truth Social. Sin embargo, Budde ha afirmado en varias entrevistas que no tiene intención de disculparse, declarando: “No voy a disculparme por pedir misericordia para los demás”.