Nuevo caso de maltrato infantil en Iquique revela condiciones extremas de explotación y abuso en el hogar

Nuevo caso de esclavitud infantil en Iquique: niño en condiciones inhumanas.
Nuevo caso de esclavitud infantil en Iquique: niño en condiciones inhumanas.

Un nuevo caso de esclavitud infantil ha sido revelado en Iquique, Región de Tarapacá, siendo el segundo incidente de este tipo que se reporta en la semana. Durante la noche del miércoles, el medio T13 informó sobre la situación de una niña boliviana que llegó a Chile con el propósito de ser explotada en la localidad de Rengo, en la región de O’Higgins, donde fue trasladada a cambio de $350 mil. La menor habría sido “vendida” por su abuela a unos vecinos, quienes viajaron a Chile para trabajar junto a ella en un campamento ubicado a orillas del Río Claro, donde realizaba labores domésticas desde la madrugada.

Detalles del caso en Iquique

En las últimas horas, se ha dado a conocer un nuevo caso relacionado, que surgió a raíz de la formalización de una mujer en Iquique por los delitos de homicidio frustrado en carácter de reiterado y maltrato habitual. Un hombre de 40 años fue visto realizando rayados en el frontis de la Iglesia Santa María de Loreto, un sitio considerado patrimonio de la humanidad.

Denuncias de los vecinos

Los vecinos de la imputada fueron quienes denunciaron la situación, ya que desde noviembre de 2023 comenzaron a escuchar los gritos de un niño de 13 años, así como los golpes que este recibía. La fiscal Paula Arancibia, jefa de la Unidad Regional de Atención a Víctimas y Testigos (Uravit), informó a Cooperativa que al menor “lo dejaban durmiendo en el patio y lo obligaban a realizar acciones como lavar el auto o recoger excrementos de animales con la mano”.

La fiscal también indicó que “no le dejaban entrar a la casa, salvo para hacer aseo; le privaban de agua y comida; y sus necesidades las hacía en bolsas, potes plásticos o botellas”. La mujer a cargo del menor, identificada como su madrastra, “lo desescolarizó desde agosto de 2024 a la fecha, por lo que lo mantuvo ajeno a cualquier contacto con otros niños o adolescentes”.

La imputada, de nacionalidad chilena, ha sido puesta a disposición de la Justicia, y se ha fijado una medida cautelar de prisión preventiva por 90 días, durante los cuales se llevará a cabo la investigación correspondiente.