A un año del megaincendio, comenzará una huelga de hambre indefinida para exigir la reivindicación de los afectados del 2 y 3 de febrero de las comunas de Quilpué, Villa Alemana y Viña del Mar.
Contexto de la huelga de hambre
Los afectados por el megaincendio que devastó las comunas de Quilpué, Villa Alemana y Viña del Mar han decidido iniciar una huelga de hambre indefinida. Esta acción se llevará a cabo con el objetivo de exigir respuestas efectivas por parte del Ejecutivo, en un contexto donde las críticas hacia la lentitud del proceso de reconstrucción y la falta de apoyo de las autoridades han aumentado.
Demandas de los afectados
Los manifestantes han elaborado un petitorio que incluye un total de 10 puntos que buscan abordar las necesidades de los damnificados. Entre las principales demandas se encuentran la entrega de un bono de acogida universal, la provisión de salud integral para los afectados, y una mayor participación del poder central en el proceso de reconstrucción. Además, se exige que se asuman responsabilidades civiles y políticas relacionadas con la gestión de los incendios, así como la presencia activa de los diferentes ministerios en las áreas afectadas.
Reacciones de los representantes de los afectados
El presidente de la Agrupación de Víctimas de Atentado en Chile del 2 y 3 de febrero, que representa a los afectados de las comunas mencionadas, ha señalado que ha transcurrido un año desde la catástrofe y que las autoridades no han proporcionado soluciones ni avances significativos.
Heriberto Ávila, uno de los representantes de la huelga, ha subrayado que las autoridades regionales no han ofrecido soluciones, argumentando que “esa es una facultad exclusiva del poder central”.
Impacto del megaincendio
Es importante destacar que más de 6 mil casas fueron catastradas tras el megaincendio. De estas, cerca de 4 mil presentan algún tipo de daño, y aproximadamente un 2,41% de las viviendas se encuentra actualmente en proceso de reconstrucción.
La situación de los afectados continúa siendo crítica, y la huelga de hambre se presenta como una medida de presión para que las autoridades respondan a sus demandas.