Horacio Saavedra recuerda la pérdida de su hijo Cristián: “Es una pena que nunca se supera”

Horacio Saavedra comparte su dolor tras la pérdida de su hijo en emotiva entrevista.
Horacio Saavedra comparte su dolor tras la pérdida de su hijo en emotiva entrevista.

Horacio Saavedra, director de orquesta, compartió su experiencia sobre la pérdida de su hijo Cristián, quien falleció hace más de 20 años, en una emotiva conversación con Rodrigo Sepúlveda en el programa “Te Invito”. Saavedra describió este evento como un golpe devastador en su vida, señalando que “es una pena que nunca se supera”. Cristián, su único hijo, falleció a la edad de 38 años, mientras Saavedra se encontraba en el pico de su carrera televisiva.

Recuerdos y anécdotas

Durante la entrevista, Saavedra recordó una anécdota conmovedora relacionada con su trabajo tras la muerte de su hijo. “Hice un programa recién él fallecido y me decían, ‘pero cómo puedes hacer un programa’, y eso es lo que le hubiera gustado a él, a mi hijo Cristián”. Esta reflexión muestra la conexión profunda que tenía con su hijo y cómo su legado sigue presente en su vida.

La vida de Cristián

Cristián Saavedra trabajó en Mega durante aproximadamente diez años como ingeniero en sonido. Su padre lo recuerda con cariño, mencionando que “era mi único hijo hombre, se llevó el apellido, pero eso es ya un detalle”. A pesar de la pérdida, Saavedra enfatiza que su hijo siempre estará presente en su vida, especialmente a través de sus nietas, quienes ahora son profesionales. “Me dejó tres enanitas así, chiquitas, que ahora son profesionales”, comentó.

La enfermedad de Cristián

En la conversación, Saavedra también abordó la enfermedad que llevó a la muerte de su hijo. Reveló que Cristián padecía de una enfermedad poco común, conocida como mal de Wegener, que es una enfermedad inmunológica. Saavedra sugirió que podría haber un componente genético en esta condición, lo que añade una capa de complejidad a la historia de su hijo.

Reflexiones finales

Al ser preguntado si había compuesto alguna obra en memoria de su hijo, Saavedra admitió: “No, porque siempre fue algo tan familiar, tan íntimo, tan nuestro, que me costaba mucho hablar del tema, yo creo que es primera vez que lo cuento”. Esta declaración resalta la intimidad de su relación y el dolor que aún siente por la pérdida.

Finalmente, Saavedra concluyó su relato afirmando: “Siempre va a estar con nosotros, toda la vida. Sobre todo ahora con las nietas, que ya son adultas, una de sus hijas me hizo bisabuelo”. Esta afirmación refleja la continuidad del legado familiar a pesar de la tragedia.