
El personal internacional de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha sido reducido en un tercio en la franja de Gaza debido a razones operativas y de seguridad, según han informado las autoridades de la organización. Esto implica que aproximadamente 30 personas, que pertenecen a diversas agencias como el Programa Mundial de Alimentos y el Programa de la ONU para el Desarrollo, abandonarán la zona.
El secretario general de la ONU, António Guterres, a través de un comunicado, explicó los motivos que llevaron a esta “difícil decisión”. La reanudación de los ataques por parte del ejército israelí, así como la prohibición del gobierno israelí de permitir la entrada de ayuda humanitaria, son parte de las justificaciones para esta determinación. En las últimas horas, se ha reportado que la cifra total de muertos en el conflicto ha superado los 50 mil en casi 18 meses.
Motivos de la reducción del personal de la ONU
El principal motivo para la salida del personal de la ONU está relacionado con la muerte de un funcionario búlgaro en las primeras 48 horas tras el fin de la tregua. Según la información disponible, los ataques que impactaron en un complejo de la ONU en Deir el Balá el 19 de marzo fueron provocados por un tanque israelí. Guterres acusó que todas las partes involucradas tenían conocimiento de la ubicación de estas instalaciones.
El ataque resultó en que otras seis personas de la organización, provenientes de distintos países, sufrieron heridas graves, algunas de las cuales podrían ser permanentes. Por esta razón, la ONU ha solicitado una investigación “completa, exhaustiva e independiente” sobre el ataque a su establecimiento en la franja de Gaza.
Compromiso de la ONU en Gaza
A pesar de la reducción del personal internacional, Guterres afirmó que los trabajos de la ONU en Gaza continuarán. “Las Naciones Unidas no van a abandonar Gaza. La Organización mantiene su compromiso de seguir proporcionando la ayuda de la que dependen los civiles para su supervivencia y protección”, reiteró.
El personal palestino de la ONU, que trabaja principalmente en la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), permanecerá en la región. Este personal está compuesto por aproximadamente 13 mil personas, quienes continuarán con sus labores en condiciones extremadamente difíciles.
Guterres también hizo un llamado a la protección de los civiles y solicitó la liberación “inmediata e incondicional” de los rehenes que aún están en manos de las milicias palestinas. Además, calificó de “urgente” la restauración de la tregua para el cese del fuego.
El secretario general concluyó su declaración afirmando que “todos los países deben hacer uso de su influencia para detener el conflicto y garantizar el respeto del Derecho Internacional, aplicando la presión diplomática y económica y combatiendo la impunidad”.